Una conjunción planetaria en Carril

Susana Luaña Louzao
susana luaña VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

Arriba, los nuevos cabaleiros; abajo, los premiados del sector.
Arriba, los nuevos cabaleiros; abajo, los premiados del sector.

Un tiempo nublado que invitaba a comer, el alargamiento de la cita gastronómica y un año bueno para el producto garantizaron un nuevo éxito de la Festa da Ameixa

16 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El día amaneció pidiendo almejas de Carril. Es cierto que las fiestas suelen preferir buen tiempo, pero a la de la almeja carrilexa le beneficiaron ayer las nubes. Una, porque la gente pasó de la playa y prefirió resguardarse al calor del guiso a la marinera y otra, porque un calor excesivo invita a irse pronto de la carpa en la que se celebra el evento.

Así que ayer, una conjunción planetaria acompañó al patrón mayor de Carril, José Luis Villanueva; al cultivador mayor, el alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, a los miembros de la Orde da Ameixa y los homenajeados este año en el transcurso de la 23 edición de uno de los encuentros gastronómicos con más solera en Galicia.

Así que el humorista Xosé A. Touriñán lo tuvo todo de su parte para contar con un auditorio interesado en su pregón, que se centró, con mucho humor, en destacar las bondades de la almeja como producto sano y saludable que ayuda a contrarrestar los demás excesos de las mesas que se sirven en cualquier jornada festiva de Galicia. Se le notaba que le quiere a la almeja, que hasta la comparó con la reina Sofía por su elegancia. No fue tan generoso con los demás miembros de la Familia Real ni con las demás especies de mariscos con los que relacionó a cada uno de ellos.

Sobre las bondades de la almeja como producto saludable y aconsejable para mantener el colesterol en su punto habló también el político socialista Modesto Pose, médico de profesión, que en un simpático guiño a su mujer, la comadrona Yolanda Carrera, dio por sentado que ella se la recomendaba a todas las parturientas.

En ese ambiente distendido se celebró ayer una nueva edición de la Festa da Ameixa de Carril con varias novedades. La primera, que la jornada gastronómica se alargó durante toda la jornada, lo que garantizó que todo el mundo se fuese satisfecho, porque además, hubo más raciones; hasta tres mil tenía previsto preparar la organización. También hubo cambio de look por parte de las damas y los cabaleiros, que estrenaron un curioso gorro mariñeiro en sustitución de la tradicional boina. José Luis Villanueva aseguró que era más cómodo y picaba menos.

Sin calores y sin agobios, incluso con una fina lluvia por momentos, se entregó a Rita Piñeiro el premio a la parquista más joven, y a Jesús Longa Dios, el reconocimiento como parquista de honra; la Ameixa de Prata a Asunción Caamaño en representación de Mariscos Mariño SL, y la Ameixa de Ouro a Manuel Calderón, responsable de Seguridad en la Capitanía Marítima de Vilagarcía. Luego, juraron fidelidad a la almeja la nueva dama y el nuevo cabaleiro de la orden. Ella, la ex conselleira de Pesca Carmen Gallego, y él, el ex diputado socialista Modesto Pose. Después comieron, que a eso iban.

Con la talla a vueltas y sin una salida

No hubo problemas a la hora de encontrar producto propio de Carril -otro no se sirve en la cita gastronómica- para dar de comer a los comensales, porque fue un año de calidad y de cantidad. Eso no quiere decir que el sector no esté preocupado, porque las limitaciones de la talla de almeja complican mucho el trabajo de los parquistas. El patrón mayor, José Luis Villanueva, no tuvo problema alguno en recordar, una vez más, sus diferencias con la conselleira Rosa Quintana y con su equipo, a la que acusó de fijar «unas exigencias en contra de los intereses del sector», que teme la llegada del invierno porque ya el año pasado tuvo que echar mano de la hucha del ISM. «Es un consellería desaparecida y no nos genera confianza -dijo Villanueva-. Y no es solo en Carril, es toda la ría».

Los estudios que no llegan

A su entender, no es de recibo que a estas alturas no se hayan hecho estudios sobre la baja productividad de Os Lombos, que puede ser la ruina para el sector. «Lo que no puede ser es que se nos diga que tenemos que seguir esperando». Y no se olvidó del grave problema del berberecho, «que vamos a tener que recuperar como sea».

Al margen de polémicas, la calidad y la cantidad de producto que este año salió de los parques de cultivo permitió servir tres mil raciones de almejas a la marinera, que son mil más que el año pasado.