Illas Atlánticas retira los restos del incendio de la isla de Cortegada

Los técnicos y operarios del parque nacional Illas Atlánticas están llevando a cabo en Cortegada labores de regeneración de los espacios naturales que incluyen la retirada de los restos del incendio que levantó todas las alarmas hace un par de semanas. Las labores no se llevan a cabo por el incendio; en realidad, están programadas desde el mes de marzo y se realizan de forma periódica en todas las islas del parque, pero como coincidió con el incendio, se van a retirar también los troncos quemados y los restos que quedaron calcinados por el fuego.

También se van a retirar parte de los árboles derribados por el viento a causa de los temporales y que están cerca de la zona del fuego, al norte de la isla, hacia Rianxo. Pero no todos, porque se aprovechará para crear un parapeto que la proteja, ya que como se pudo ver en los inviernos más duros, esa parte de la isla está a merced de las borrascas y los vientos huracanados.

Evolución natural

A raíz del incendio, fueron muchos los que se acercaron esa misma noche a Cortegada, para colaborar en las tareas de extinción, y en los días siguientes. Y a los vecinos les llamó la atención que hubiese tanta maleza en la isla y que no se realizasen tareas de limpieza y de retirada de madera seca, que pueden favorecer la propagación del fuego.

Todo eso tiene una explicación, como aclararon en los últimos días los técnicos que se encargan del cuidado del parque. Y es que al tratarse de un espacio protegido, se procura preservar la evolución natural y minimizar la labor del hombre. De esa manera, si en un monte común lo habitual es retirar todo tipo de vegetación para evitar la propagación del fuego, en un parque nacional se procura facilitar el proceso natural de regeneración de la naturaleza.

Como indican los responsables de Illas Atlánticas, antes de que las Cíes, Ons, Sálvora o Cortegada fuesen parque nacional, sus espacios sufrieron agresiones de todo tipo, casi siempre por la acción del hombre -pastoreo, cultivos, excrementos del ganado-, o como consecuencia de los incendios.

Ante esa situación, el Plan Director de la Red de Parques Nacionales trabaja por preservar el paisaje como uno de sus principales valores y «recuperar un estado lo más parecido posible al resultante de la evolución natural». Es cierto que el paisaje, por sí mismo, evoluciona de forma natural, pero el hombre modifica o acelera de forma brusca esos cambios. «Es entonces -dice dicho plan- cuando el hombre debe volver a intervenir para recuperar el panorama anterior a esa intervención».

Y con esa filosofía y esos objetivos se llevan a cabo los trabajos en la isla, aunque los métodos puedan sorprender al profano.

Aprovechando las labores, se hará un parapeto que proteja la zona de los fuertes vientos

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