Un grupo musical formado por una oenegé que trabaja con niños huérfanos en Uganda actúa el viernes en el auditorio
09 mar 2015 . Actualizado a las 21:25 h.No es habitual que los ritmos espirituales de la música y los cantos afroamericanos que salieron de las iglesias lleguen a Vilagarcía. Pero lo van a hacer este viernes, y el beneficio para quien asista al espectáculo será doble, porque por una parte disfrutarán de esos cánticos casi mágicos que parecen alcanzar el paraíso con sus sones y por otra, colaborarán con uno de los proyectos solidarios más hermosos que se llevaron a cabo en los últimos años entre las poblaciones más necesitadas de África. Se llama «Música para salvar vidas», que ya dice mucho.
Cómo surgió la oenegé
Música para salvar vidas» se creó hace diez años con el objetivo de salvar a unos niños que habían sufrido de abusos y abandono. Como explica la entidad, «cayeron en nuestras manos sin que hubiésemos pensado antes en montar ninguna oenegé, pero las circunstancias y la situación de aquellos niños de África nos obligaron a ello. Para ello tuvimos que montar un orfanato en Uganda, en las afueras de Kempala». La asociación se encarga en la actualidad de la educación integral de treinta niños. «Les educamos como si fueran nuestros propios hijos, detectando talentos y ayudándoles a construirse un futuro profesional en su país. Les acogemos en una casa donde se les da un trato muy personal, ayuda y cariño. Todos cursan estudios de primaria, secundaria o superiores, y mantenemos la ayuda hasta que funcionen por ellos mismos». No es el único proyecto en el que está inmerso la oenegé, que se vale de la música como instrumento para la superación personal, porque fuera del orfanato apoyan a otras comunidades de personas para ayudarlas a sobrevivir en un entorno casi siempre hostil.
La música como terapia
La música es una parte fundamental del proceso de reconstrucción de la persona y con su terapia compensa el abandono y la miseria. Y no solo eso, sino que los proyectos musicales que nacen de estas experiencias son también una fuente de financiación para los programas de la oenegé, de tal manera que el beneficio conseguido revierte de nuevo en la comunidad. Así, los niños del orfanato de Uganda, tras completar sus tareas escolares en los centros en los que están matriculados, reciben clases de canto todos los días de la semana y de baile los fines de semana. Además, todos ellos asumen responsabilidades en el hogar y los mayores proporcionan apoyo a los más pequeños, como si fuesen hermanos. «Antes de llegar al orfanato, muchos de estos niños y niñas no habían recibido apenas amor y apoyo en sus vidas. Muchos no sabían lo que era recibir un abrazo o un beso o mantener una conversación cara a cara. No sabían cómo comunicarse y no conocían el valor de sus propios pensamientos e ideas».
El grupo de góspel
De esa experiencia surgieron ya varios proyectos laborales. Algunos chicos gestionan un cíber café, y otros están trabajando. «Tenemos ya dos enfermeras tituladas, un técnico de laboratorio, un mecánico, una peluquera...». Y un grupo montó el sexteto de góspel Aba Taano que recorre los principales escenarios del mundo y cuya gira llega ahora a Vilagarcía. El concierto será el viernes 13 a las 21.00 horas en el auditorio municipal, y el precio de las entradas es de 10, 8 y 6 euros dependiendo de la localidad. Eso sí, si se adquieren por Servinova, no habrá recargo de gestión, por tratarse de un proyecto solidario. También se pueden adquirir el día del concierto a partir de las 19.00 horas en el auditorio.
La anécdota del día
Los chicos de Aba Taano tendrían que haber estado ayer en Vilagarcía para dar a conocer su espectáculo. Pero por desconocimiento de la geografía gallega, hicieron uso del GPS. Pero en lugar de Vilagarcía pusieron Vilalba, y acabaron en Lugo. Anécdotas aparte, prometen que el viernes sí estarán puntuales en el auditorio. Para salvar vidas.
El grupo musical se perdió porque puso Vilalba en vez de Vilagarcía en el GPS
Las entradas
no tienen gasto de gestión por ser un concierto solidario