Cuatro telleiras de la desembocadura del Ulla entran en la lista roja del patrimonio

VALGA

Dos están ubicadas en el concello de Valga, una en Catoira y la cuarta en Rianxo
22 jul 2020 . Actualizado a las 23:47 h.El patrimonio arqueológico industrial que baña el Ulla ha recibido un importante toque de atención estos días. Y es que cuatro antiguas fábricas de tejas ubicadas en la desembocadura del río ingresaron ayer en la lista roja del patrimonio español, el catálogo que elabora la prestigiosa asociación Hispania Nostra para denunciar el declive o desaparición de monumentos o elementos singulares. Se trata de la telleira de Quintáns, en Rianxo, así como la de Roeiro y la de Padín, en Valga, y la de As Rañas, en Catoira. Son edificios que «conformaron en Galicia una singular red industrial desde finales del siglo XIX que merece ser recordada y no permitir que caiga en el olvido», explica la asociación. Y justifica, así, su apuesta por incluir estas estructuras en un listado del que forman parte 800 edificios en toda España.
El estado en el que se encuentran estas instalaciones es, ciertamente, sonrojante. «En algunas se conservan solo los muros perimetrales; en otras, incluso la vivienda de los telleiros, las eiras, el horno y el embarcadero. Lamentablemente, casi ninguna de ellas goza de una protección legal específica, y en la actualidad resisten al paso del tiempo, abandonadas, con los tejados desaparecidos y cubiertas de maleza».
Las cuatro telleiras de la desembocadura del Ulla tienen una historia cruzada, con una serie de personajes moviéndose entre ellas. En el caso de las tres ubicadas en la orilla sur de la ría, estaban cerca unas de otras. En ellas se trabajaba con barro que procedía de Dena. Según los datos recabados por la asociación Hispania Nostra, la materia prima era de dos calidades: barro del monte de Dena, y barro del mar. «El del mar era más fuerte, pero difícil de romper y de picar», relata el colectivo.
Grado de protección
De las tres telleiras repartidas en el Monte da Cabreira, al sur del río, la mejor conservada de todas ellas es la de Roeiro (Valga), de la que hemos heredado el horno, restos del embarcadero y de la vivienda de los telleiros. Lo que queda de esas estructuras no ha sido objeto de ningún tipo de protección. Tampoco la de Padín, de nuevo en el término municipal de Valga, dispone de protección específica, mientras que la de As Rañas (Catoira) figura al menos en el Plan Xeral de Ordenación Municipal. En idéntica situación se encuentra la de Quintáns (Rianxo).