Valga forma a su personal municipal para crear una mesa contra la violencia machista
VALGA
La secretaría xeral de Igualdade la Xunta, en el marco de un acuerdo de colaboración firmado con la Federación Galega de Municipios y Provincias, asignó al Concello de Valga la formación del personal municipal para la constitución de una mesa local de coordinación institucional contra la violencia de género.
Las jornadas formativas se desarrollarán los día 4 y 11 de diciembre y su objetivo es facilitar el trabajo grupal y la participación de los agentes que forman las mesas locales. ¿Cómo lo hacen? Pues mejorando la organización y el proceso de toma de decisiones.
Varios son los retos que se marcan con estas sesiones: mejorar la eficiencia del conjunto de espacios de toda de decisiones, asambleas, y reuniones en las que se organizan las mesas locales, identificar y poner en valor las lógicas de trabajo, así como los elementos u obstáculos que puedan dificultar la operatividad de las mesas locales, identificar a los agentes y entidades del territorio de cara a abrir su participación en la mesa o en la búsqueda de alianzas sobre las que diseñar estrategias de prevención y lucha contra la violencia de género, mejorar la coordinación y participación activa de las personas que forman parte de la mesa local y, por último, conocer las competencias y habilidades personales para un liderazgo democrático y transformador: comunicación, empatía, facilitación de grupos, mediación, etc.
Las mesas locales de coordinación institucional contra la violencia de género son instrumentos en los que están representados todos los ámbitos municipales implicados, directa o indirectamente, contra la violencia de género. Es decir, el personal del Centro de Información a la Mujer, las fuerzas y cuerpos de seguridad, servicios sanitarios o servicios sociales entre otras.
Entre las funciones de las mesas locales destacan: mejorar la detección precoz de los casos de violencia de género, optimizar la coordinación de los agentes implicados en la lucha contra esta lacra, ofrecer una atención y respuesta ágiles a las víctimas, mejorar la protección de las consideradas de alto riesgo e informar y sensibilizar en la materia tanto a los profesionales como a la población.