El Viño Tinto de Barrantes también se cuela en la cocina

Maruxa Alfonso Laya
m. alfonso RIBADUMIA / LA VOZ

RIBADUMIA

MONICA IRAGO

Un showcooking y la orquesta Panorama pusieron fin a la fiesta

05 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El Tinto de Barrantes sigue despertando pasiones. Así al menos quedó demostrado en una nueva edición de la fiesta que el Concello de Ribadumia le dedica a esta elaboración. Durante el fin de semana, fueron miles las personas que se pasaron por el municipio para disfrutar de las actuaciones y conciertos pero, sobre todo, para tomar una taza de este vino. En la última jornada, la de ayer, el cocinero Miguel Mosteiro se encargó de demostrar que el tinto, además de catarse, también puede cocinarse. Su showcooking y el concierto de la orquesta Panorama fueron lo más destacado en la última jornada.

«O Tinto Barrantes tamén vale para cociñar, porque mancha e da sabor aos nosos pratos», aseguró Mosteiro. Y lo demostró confeccionando un menú en el que todos sus platos tenían este vino como ingrediente común. El primero fue una merluza curada en agua de mar y cocinada al vapor que sirvió sobre una crema de apionabo preparada con una reducción de tinto. «Con ese proceso concéntranse os azucres, evapórase o alcohol e concéntranse os aromas», añadió.

Este mismo vino fue el que utilizó para marinar la carne de cerdo con la que preparó unos brioche de cochinita pibil, un plato típico de la cocina mexicana. «O porco adobámolo, entre outras cousas, con viño tinto, para que colla o seu sabor», explicó. El menú se completó con un postre de mouse de yogur con un culis de frutos rojos en el que, por supuesto, se había empleado vino tinto. Las elaboraciones encantaron a los presentes, que dieron buena cuenta de los platos.

El showcooking, junto con la tradicional andaina, fueron los actos que inauguraron el programa de ayer, la última jornada de la fiesta. A partir de la una de la tarde, la carpa volvió a llenarse de gente dispuesta a dar buena cuenta de los vinos a exposición. La afluencia de visitantes al municipio fue constante durante toda la jornada y se incrementó considerablemente por la noche, cuando la orquesta Panorama se encargó de poner el fin de fiesta. Su concierto era uno de los más esperados para poner el broche de oro al medio siglo de celebraciones que esta parroquia de Ribadumia lleva dedicando a su vino favorito, el Tinto Barrantes.