El Arnoia mejora la nota media del cuarteto ourensano

RIBADUMIA

MIGUEL VILLAR

El Velle es el rey del empate y se acumulan problemas clasificatorios

09 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La competición de la Preferente Sur llegó a su séptimo episodio y el debutante Atlético Arnoia sigue liderando al contingente ourensano, después de un meritorio triunfo sobre el tapete de Barreiro, donde doblegó al Gran Peña.

Los discípulos de Iván González son quintos, solo tres puntos de las plazas de ascenso y, junto al líder Atios y el recién descendido Ribadumia son los únicos invictos del grupo hasta la fecha. La eclosión goleadora de Dani Lamelas, autor de cinco dianas en seis partidos, apuntan a la progresión de un centrocampista con potencial en los últimos metros, ya que en la pasada anotó nueve tantos en la totalidad del curso en categoría provincial.

Y todo antes de que se toquen los polos opuestos de la representación provincial, porque el conjunto ribeirao recibirá el próximo domingo a un Polígono que sufrió un duro varapalo ante el Beluso, un rival directo que goleó en el feudo industrial. Se vio frenada así la progresión del conjunto de Rubén García, que al menos se había mostrado competitivo en anteriores jornadas, sumando cuatro puntos ante su público. Para un equipo al que le cuesta mucho puntuar fuera, el desliz fue importante.

Los problemas del Velle se centran en la carencia de gol. Los hombres de Óscar Sabucedo arrancaron un valioso empate del feudo del Céltiga, pero sus seis goles son muy poca rentabilidad en siete jornadas, por mucho que también se sitúen entre los que menos encajan del grupo, de ahí los cinco empates. Ver puerta y enlazar una racha de partidos sumando de tres en tres parece prioridad para un equipo que recibirá el domingo a un Juvenil de Ponteareas endeble en defensa hasta ahora.

Por último, el Barbadás volvió a pinchar en casa ante el Cambados y solo fue capaz de ganar uno de sus cinco últimos partidos. Los de Agustín Ruiz pierden comba con la cabeza demasiado pronto y afrontan una salida con trampa al campo de A Lagoa, donde el Mondariz suele hacerse fuerte, aunque este año no le están saliendo los números y aún no ha conseguido ganar. Es todo un examen.