El Everest en tarta y como ejemplo ante las metas de la vida

B. c. RIBADUMIA

RIBADUMIA

MARTINA MISER

Las deportistas hablaron de su experiencia en las alturas y en el lago Baikal

05 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La alpinista viguesa Chus Lago acudió ayer a Ribadumia para hablar de la aventura que emprendió en el lago Baikal dentro del programa Compromiso con la tierra. Los alumnos de primero de la ESO hicieron un seguimiento exhaustivo de una expedición que llevó a Chus Lago, Verónica Romero y Rocío García a recorrer 640 kilómetros por Siberia el pasado febrero. El objetivo de este proyecto es visibilizar y concienciar a la población del problema que supone el calentamiento global, y de la necesidad de cuidar el planeta hablaron ayer Chus y Verónica en el auditorio de Ribadumia. En la actualidad, los chicos están más concienciados que sus padres en estos temas, pero sigue siendo necesario formarlos para que aprendan que hay que cerrar el grifo, apagar la luz y que no se debe tirar las toallitas higiénicas al inodoro, según explica Lago.

Pese a sus múltiples compromisos, las deportistas no quisieron fallar a la invitación del colegio Julia Becerra Malvar y conquistaron al público con la narración de sus andanzas en el lago Baikal y en lugares extremos. La viguesa coronó en tres ocasiones el Everest y la cumbre del mundo no podía faltar en el relato, y no faltó, máxime cuando su masificación, con muertes incluidas, es noticia estos días.

Este fenómeno y su experiencia como alpinista le sirvieron para lanzar un mensaje a los chicos de Ribadumia: «Los retos no tienen atajos, cuando uno se cae hay que levantarse para seguir», indicó.

Chus Lago sabe bien de los rigores de esta montaña, lo que no sabía es que también se podía comer. Los alumnos obsequiaron a las estrellas del día con una tarta con forma de Everest que logró sorprenderlas. «Fue muy bonito», señaló. Ayer fue un día dulce para todos ellos.