El Ribadumia apea al Bergantiños del liderato, pero con escaso premio

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo RIBADUMIA / LA VOZ

RIBADUMIA

Álex Diéguez salvó un punto para el cuadro de Carballo a balón parado en el 76, tres minutos después de que el colegiado le anulase un gol al equipo local

18 mar 2019 . Actualizado a las 00:08 h.

Con un notable cabreo con el colegiado por su actuación en la segunda parte, el Ribadumia prolongó a ocho su serie de partidos invicto con un 1-1 insuficiente para su lucha por la permanencia, aún con la satisfacción de haberse mostrado capaz de privar a un Bergantiños en crisis del liderato.

Partiendo de que el 2-4 obtenido siete días atrás por el Arousa en As Eiroas resultaba una excepción a la regla, el Ribadumia demostró conocer a la perfección la letra de la canción que le tocaba entonar para sacar rédito de su enfrentamiento con el Bergan. Con una presión alta, y sus tres líneas en 4-4-2 muy juntas e hilvanadas, los de Luis Carro apenas ofrecieron concesiones a un rival que sufrió de lo lindo no ya para manejar el balón del centro del campo en adelante, sino siquiera para intentar percutir la portería defendia por Roberto Pazos con balones largos a su hombre-gol, Rubén Rivera. Y así transcurrió la primera parte, con mucha intensidad en el juego de contacto con el que el Ribadumia igualó a su huésped, y poca, muy poca presencia en las áreas.

Un disparo frontal de Monchito muy alto precedió las dos únicas acciones con marchamo de gol en la antesala del tanto de Diego Abal. Una recuperación de Borja Facal en la medular acabó en asistencia a Rubén Rivera, pero Roberto Pazos acertó en su despeje de puños con el delantero centro escorado; y un centro de Aarón al corazón del área local encontró un agujero en el clamoroso error de Bugallo al despeje, dejando a un sorprendido Baleato en disposición de disparar ante Pazos, pero su ejecución fue manifiestamente deficiente.

En una guerra de trincheras el Ribadumia encontró ese golpe de efecto que tantas veces desencalla una situación de parálisis. Abelleira botaba en el minuto 30 una falta a 25 metros de la portería de Cristopher, algo escorada hacia la banda derecha, encontrando la testa de Diego Abal al segundo palo en el límite con el área pequeña. 1-0.

Entre los minutos 33 y 34 un certero disparo de Rubén Rivera despejado por Pazos dio paso a dos córneres con cabezazos del propio Rivera y Borja Facal. Pero el que más cerca estuvo de volver a mover el marcador fue el Ribadumia, en un mano a mano de Hugo Soto por cortesía de Bugallo; el punta tiró el cuero al muñeco.

Hugo Soto dispuso en el arranque de la segunda parte de un segundo tú y yo con Cristopher, abortado otra vez por el portero visitante. Miguel Figueira, que ya había dado entrada a Jorge Sáez tras el descanso, introdujo a Álex Diéguez en el 50, y los cambios le dieron el control del balón y el dominio territorial al Bergantiños, empujando a su anfitrión a tres cuartos de campo propio. Sin embargo, el cuadro coruñés se topó con un muro que únicamente pudo perforar a balón parado, en el 76, en una falta de 25 metros con Diego Fernández enfilando el balón entre los tres palos, y el rechace de Pazos cazado por Álex Diéguez. Una acción que podría no haber tenido lugar de no haber anulado el colegiado un gol a Eloy en el 73 señalándole una falta en carrera sobre Marcos como último defensor, cuando desde la grada parecía que la infracción era del zaguero. Un disparo cruzado de Diego Abal fue el único conato real de ruptura del 1-1 final.

FICHA:

RIBADUMIA (1): Roberto Pazos, Santi (Javi Domingo, min 80), Diego Abal, Miguel Vázquez, Manu Bugallo, Óscar, Eloy Fariña, Manu, Hugo Soto (Gabi, min 71), Monchito (Cerqueiras, min 62) y Tomás Abelleira

BERGANTIÑOS (1): Cristopher, Borja Facal, Aarón, Diego Fernández, Marcos, Granada (Álex Diéguez, min 51), Cano, Toni (Ekedi, min 66), Rivera, Baleato y Cañi (Jorge Sáez, min 46)

Goles: 1-0, min 30: Diego Abal. 1-1, min 76: Álex Diéguez.

Árbitro y tarjetas: Juan Luis Davila (Vigo). Expulsó por doble amonestación al visitante Rubén Rivera (min 92). También mostró amarillas a los locales Bugallo, Tomás Abelleira, Roberto Pazos, Santi, Diego Abal y Cerqueiras; y a Borja Facal, Cano y Aarón.