Embragar y primera en A Lomba

Pablo Penedo Vázquez
pablo penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

RIBADUMIA

MONICA IRAGO

Frente al Choco, el Arousa se examina por quinta vez del carné de 3 puntos. El Céltiga, por su parte, recibe a un Silva lanzado

17 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Al segundo proyecto del Arousa de Jorge Otero le está pasando como a esos alumnos que se presentan al examen del carné de conducir cansados de saber manejar un vehículo desde hace meses, cuando no años. Tanto ellos, como su entorno, dan por hecho que se sacarán el permiso a la primera, para descubrir que los tics adquiridos le terminan pasando una cara factura a los ojos del examinador. Con una sobresaliente plantilla potenciada en su calidad y cantidad, con muchos de los hombres que unos meses atrás quedaban a las puertas de la fase de ascenso con el mismo estratega al frente del banquillo, el conjunto arlequinado se ha visto incapaz hasta hoy de aprobar la que se daba por hecho resultaría una maría: conseguir el primer triunfo de la temporada. Con un calendario que se aparecía como un buen amigo dispuesto a echarle al Arousa una mano en el empeño por repetir el común denominador del cuadro de A Lomba desde su último regreso a la Tercera División; el de un arranque de Liga cargado de puntos y excelentes sensaciones.

Vibra, pero no arranca

Lo de las sensaciones se ha repetido en las cuatro primeras jornadas del presente campeonato. Pero no así lo del avance en ascenso vertical en la clasificación. Y en estas nos encontramos hoy frente al Choco (A Lomba, 17 horas), con el Arousa examinándose por quinta vez del carné de 3 puntos. Con la necesidad cada vez más imperiosa de sacárselo para, embragando y metiendo la primera, comenzar a recuperar terreno perdido con sus rivales por los puestos de promoción de ascenso desde su actual estacionamiento en las plazas de descenso a Preferente. Zona prohibida esta que siete días atrás pasaba a ocupar el equipo por primera vez desde la temporada en la que dijo su último adiós a la condición de conjunto de Tercera División, a finales de la pasada década. 

Jorge Otero se mostraba ayer francamente optimista para hoy. «Especialmente esta semana notei o equipo tranquilo. Iso dáme confianza», dice. Lejos de sentir la ansiedad que se podría esperar de un grande que no logra arrancar su primer triunfo en el primer mes de Liga, el entrenador del Arousa percibe en sus hombres la confianza que da la notable imagen que están ofreciendo en sus partidos. Con dos asignaturas pendientes para aprobar el carné de 3 puntos. Poner fin a los errores defensivos residuales que están penalizando al cuadro vilagarciano con gol en contra, y materializar algunas más de las muchas ocasiones que los de Otero tienen para matar sus partidos. 

La duda frente a la seguridad

Con todos sus hombres disponibles, el técnico arlequinado aguarda a un Choco que «vén de conseguir o seu primeiro triunfo, e virá a xogar coa nosa ansiedade por facer o mesmo, tentando evitar un ritmo alto de xogo, para o que dispoñen de moi bos futbolistas».

Otro que necesita aprobar examen hoy es el Céltiga. En su caso, tras encadenar tres 0 después de su 3 de la jornada inaugural. El problema para los de Edu Charlín es la dureza del contenido de su prueba en el Salvador Otero (18 horas). Con un Silva por rival, «que vén empalmado», comenta el entrenador arousano. 

Tras caer 4-1 con el Compos, el cuadro coruñés enlazó tres triunfos, superando en las dos últimas semanas a dos grandes plantillas como las del Somozas (2-3) y Barco (2-0), a lo que añade el título autonómico de Copa RFEF derrotando el pasado jueves 2-1 al Alondras en la final. Con efectivos capaces de desplegar casi cualquier variante de juego, el Silva se antoja hueso duro para un Céltiga sin Stefan ni Capi, lesionados.

O Barco, largo camino para el Ribadumia

Alcanza la quinta jornada de Liga en el grupo de tres equipos que, como el Arousa y el colista Noia, todavía no saben lo que es ganar un partido esta temporada. Una barrera que el Ribadumia intenta derribar esta tarde en el otro extremo de Galicia. Hasta O Barco se desplaza el equipo dirigido por Luis Carro, que a partir de las seis de la tarde, sobre el césped de Calabagueiros, se las verá con una de las plantillas más potentes del grupo gallego de la Tercera. Claro que el Barco tampoco puede presumir de haber arrancado con fuerza la temporada, undécimo con 5 puntos de los 12 disputados hasta el momento. Luis Carro aguarda de su rival que «busque levar o peso do partido; tenta xogar, pero tamén se sinte cómodo na transición, nun campo grande como o seu». Jónathan Somoza, de viaje, y Teti, aún lesionado, son bajas en el Ribadumia.

Sin confianzas del Vilalonga con el colista

Prolongar su impoluta hoja de servicios, con un triunfo y tres empates en las cuatro primeras jornadas de Liga. Este es el objetivo con el que esta tarde se planta el Vilalonga en San Lázaro de Noia (18 horas) frente al colista del grupo gallego de la Tercera División. Un Noia con un solo punto en su casillero, frente a los 6 que sitúan al cuadro celeste séptimo en la clasificación. Así las cosas, el entrenador del conjunto arousano, César Sánchez, repetía ayer el mantra que ha venido inculcando a sus hombres desde el primer día de trabajo de un plantel modesto: «Si le jugamos a cualquier equipo mirando a la clasificación, nos estaremos equivocando. Como nos relajemos, vamos a perder». Sobre el Noia, Sánchez muestra su extrañeza «no por sus derrotas, sino por lo mucho que está encajando -16 goles- después de mostrarse muy seguro en pretemporada».