«Es un recurso que puede tener una trayectoria internacional»

b. c. ribadumia / la voz

RIBADUMIA

14 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Su jardín de Quinteiro da Cruz (Ribadumia) es un oasis para los amantes de las camelias. Allí crecen unos cinco mil ejemplares pertenecientes a 72 especies, en las que florecen 2.000 variedades distintas de flor. Pedro Piñeiro heredó esta pasión de su padre, Emiliano Piñeiro, que trajo a Galicia las primeras camelias amarillas desde Vietnam, en el año 1975. Siendo alcalde de Vilagarcía, en los años sesenta, introdujo a esta ciudad en el circuito de la exposición de la camelia, codeándose con Vigo y Pontevedra, y promovió la flor más delicada de Galicia allá por donde fue. Hoy, Emiliano Piñeiro da nombre a una reticulata, cruce de camelias rosas y rojas que alcanza los 25 centímetros, salida de los jardines de Ribadumia.

Esta nueva variedad será presentada a final de mes en un congreso que se celebrará en China, en el que Piñeiro también tendrá ocasión de dar a conocer el primer sistema de guía por realidad aumentada que se implanta en los jardines de Europa. Quinteiro da Cruz forma parte de la Ruta dos Xardíns da Camelia, lo que ha propiciado que en los últimos años recibiera numerosas visitas de público especializado en la materia, sobre todo extranjeros. Precisamente ahora comienza la temporada alta, coincidiendo con la época de floración, «aunque estos temporales no están ayudando mucho», explica Piñeiro.

Pero Quinteiro da Cruz da para mucho más. Allí también se elaboran productos de cosmética y se ha convertido en el primer jardín del continente europeo en producir té de camelia -en las islas Azores llevan doscientos años haciéndolo y en China, miles-. Se elabora a partir de los brotes más tiernos y tras un proceso de secado específico. Las cremas y los tes se pueden adquirir en el propio pazo pero va llegando el momento de sacarlos también al exterior. «En Galicia estamos empezando pero la camelia es un recurso que puede tener una trayectoria internacional. Tenemos mucho campo por explotar, tanto desde el punto de vista turístico como científico», según señala el empresario.

Quinteiro da Cruz recibe cada vez más turistas y produce té y su propia gama de cosmética