Fin a la ocupación ilegal en Batalla de Lepanto: la residencia Angelito queda vacía

leticia castro O GROVE / LA VOZ

O GROVE

El desalojo del inmueble, en el centro de O Grove, se llevó a cabo sin altercados y sin rastro de okupas, y puso fin al calvario sufrido por los vecinos

24 nov 2021 . Actualizado a las 23:05 h.

La expectación en la calle Batalla de Lepanto era palpable a primeras horas de la mañana de este miércoles, cuando un amplio dispositivo de Guardia Civil y Policía Local de O Grove procedía a desalojar, al fin, el inmueble de la residencia Santo Ángel, objeto de okupas durante los últimos seis años, tal y como relatan los agentes. Aunque lo encontraron ya vacío, confiesan que la pasada noche habían dormido en su interior al menos dos personas. A lo largo de la semana fueron disuadiendo a los «inquilinos» para que se fueran de manera voluntaria, evitando así enfrentamientos en el último momento. Parece que eran seis o siete los últimos habitantes de Angelito, «aunque hubo momentos que llegaron a ser catorce», asegura Fran Candal, jefe de la Policía Local.

Una vez en el interior se procedió a revisar el estado del edificio y a tapiarlo definitivamente para evitar nuevos problemas. La cantidad de basura acumulada, cristales rotos y el olor a podredumbre sobrepasan los límites de lo imaginable, algo que se repetía en cada una de las plantas de la antigua residencia, que está totalmente destrozada: montones de bolsas de deshechos sobre los que yacían los colchones para dormir, restos de comida en suelo y paredes y un largo etcétera. También había mensajes de despedida en las paredes, los que más llaman la atención dirigidos a José Antonio Cacabelos: «Señor Alcalde, ante Dios no digas que otros fueron el dueño de tu alma», o «espero no volvamos a vernos en esta galaxia, misión cumplida». También había palabras de agradecimiento para el que fue su hogar: «Gracias por la vida que nos diste Santo Ángel».

Desde octubre

Según comenta el jefe de la Policía Local, este operativo comenzaba, con total discreción, a comienzos del pasado mes de octubre, semanas después del fallecimiento de su ex propietario que tenía un alquiler social en la vivienda anexa a la residencia. Al parecer ambos edificios se comunican, circunstancia que fue aprovechada por los okupas para intentar acceder al inmueble contiguo, donde por suerte no hay que lamentar destrozos. Esto se debe principalmente a la diligencia con la que actuaron ambos destacamentos, tanto la Policía Local como la Guardia Civil de O Grove, que trabajaron mano a mano en esta investigación, algo que quiso destacar el regidor grovense, que se trasladó al lugar junto con el concejal de Seguridad Ciudadana, Santiago Meis, y otros miembros del ejecutivo.

En cuanto a la propiedad del edificio, una entidad bancaria que adquirió el bien cuando fue subastado, «hay que decir que finalmente se hará cargo de los costes del tapiado, la limpieza del edificio y el desbroce de la finca», señalaban, una huerta en la que habitan enormes ratas.

Los informes facilitados por los agentes apuntan además a que habría otro edificio en la calle Conchases que empieza a generar problemas, por lo que se están realizando las actuaciones oportunas para proceder al tapiado también de ese inmueble en los próximos días.

Además, los agentes realizarán una vigilancia continúa en el municipio para que este tipo de movimientos no se reproduzcan, puesto que sospechan que alguno de estos okupas pueden intentar acceder a otras propiedades, que ya están en el punto de mira de ambas brigadas.