Los sindicatos confían en el futuro de la conservera grovense después de que una empresa de Murcia y otra de Valencia presentasen ofertas para su adquisición
11 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.La historia reciente de la comarca de Arousa está atravesada por el recuerdo de los largos conflictos laborales en los que decenas, cientos de mujeres, plantaron cara ante el cierre de las empresas de conservas en las que trabajaban. Grandes nombres del sector, grandes naves industriales han ido quedándose vacías, como los sueños hechos pedazos. Muchas de esas historias, demasiadas, se eternizaron antes de llegar a un mal desenlace. No parece que eso vaya a ocurrir con Thenaisie Provoté, a tenor de lo que ayer manifestaban los dos sindicatos que forman el comité de empresa, la CIG y CC.OO. Tras saberse que dos empresas han oficializado in extremis una oferta para hacerse con la planta cuando esta estaba a punto de iniciar el proceso de liquidación, ambas centrales confían en que «Thenaisie non se pecha».
La frase, con toda su rotundidad, la pronunció Rosa Abuín, del sindicato nacionalista. «Hai dúas ofertas presentadas no rexistro mercantil». Una procede de un empresario murciano, otra de un grupo de Valencia. Ambas deben ser aún analizadas con lupa por los sindicatos y por el administrador concursal pero, de entrada, nada en ninguna de las propuestas ha hecho saltar las alarmas de los representantes de los trabajadores.
La oferta planteada desde Murcia es, según la CIG, «un proxecto a medio prazo». El potencial comprador ha expresado su deseo de acometer una profunda renovación de la factoría, lo que la convertiría, según Francisco Villar, de CC.OO, en «unha planta punteira en Galicia». Pero eso supondrá una gran inversión de dinero y de tiempo: calculan que la renovación de la factoría llevaría alrededor de un año, tiempo durante el cual solo se garantizaría el empleo de seis trabajadores de la planta de Mos y de cuatro de la de O Grove. El resto de la plantilla se quedaría temporalmente fuera del proyecto, ya que «hai o compromiso de collelos a medida que se recupere a actividade», explica Villar.
La oferta del grupo valenciano es, a corto plazo, más atractiva en términos de empleo. Según los datos ofrecidos por la CIG, esta propuesta garantizaría el mantenimiento de 51 trabajadores en O Grove y de 20 en la planta de Mos. La propuesta económica, sin embargo, es más baja que la de su rival. «Neste caso, nós aínda non coñecemos o plan de negocio que presenta esta empresa, así que non podemos dar unha opinión sobre o mesmo», apunta Villar. En cualquier caso, igual que Rosa Abuín considera que el futuro de la empresa conservera está garantizado: siendo dos los compradores en liza, y habiendo demostrado los dos un interés real en hacerse con la firma para darle continuidad al negocio, «moito se terían que torcer as cousas» para que el de Thenaisie Provoté no sea un final feliz.
Los dos sindicatos tenían noticias de la posible presentación de una tercera oferta, en este caso del grupo Rías Baixas, pero esa posibilidad no ha fraguado finalmente: la empresa no iba a hacer una apuesta si no contaba con un aval del Igape que le diese cierta ventaja a la hora de negociar con las entidades financieras. No se han dado esas circunstancias.
«A situación de hoxe non ten nada que ver coa de hai quince días. Unha e outra oferta apostan por manter a unidade produtiva. Está claro que con loita e traballo, as cousas se conseguen», razonaba ayer Rosa Abuín. La portavoz del sindicato CIG aprovechó la ocasión para mostrarse muy crítica con el papel que el gobierno local de O Grove ha jugado en este conflicto: ninguno. «O Grove precisa das súas industrias. Non pode ser que se queira facer del unicamente unha localidade turística», dice Abuín.