O Grove acomete un plan de asfaltados para frenar la erosión por las lluvias

La Voz O GROVE / LA VOZ

O GROVE

MONCIA IRAGO

La primera fase, en la que el Concello invertirá cincuenta mil euros, se centra en Xesteiriña, A Cachada y Luis Seoane

18 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay otros factores que conducen a este desgaste, pero sin duda la cadena de borrascas que está caracterizando este invierno en las Rías Baixas es una de las principales razones que explican el rápido deterioro del firme en muchas de las vías principales y secundarias de O Grove. A esta cuestión se refirió ayer el alcalde, José Cacabelos, quien explica que el Concello está trabajando en un plan de asfaltados que se desarrollará a lo largo de todo este año. Su primera fase, de hecho, ya se ha activado. En ella, las arcas municipales emplearán cincuenta mil euros.

El regidor socialista subraya que se está asfaltando el tramo de Xesteiriña, en Rons, la subida de A Cachada, frente al puente de A Toxa, y el tramo de Luis Seoane que discurre entre Barqueiras y Confíns. Esta última, apunta Cacabelos, es la actuación más importante de esta fase inicial de los trabajos. Tras el fresado del firme, y siempre que el tiempo lo permita, el lunes llegará la aplicación de una capa de rodadura nueva.

«Detectamos también problemas en Luis A. Mestre, puntos de la avenida de Portugal y la zona de Terra de Porto que conecta con el paseo de Lordelo», apunta el alcalde. Su equipo está elaborando un proyecto que permita obtener financiación para intervenir en toda esta área, probablemente a través del Plan Concellos de la Diputación. Lo que el gobierno socialista quiere para Luis A. Mestre es alcanzar un convenio con la Xunta -es de titularidad autonómica- para abordar dos problemas: el deterioro del asfaltado, en una vía muy transitada por el tráfico pesado, y el mal estado de las redes de abastecimiento y saneamiento.

La arena de las playas

Cacabelos indica un último problema, asociado también a la acción del mal tiempo y la fuerza del mar: la pérdida de arena en determinadas playas del municipio, como Pipas o Reboredo, con taludes de varios metros, o el paseo de San Vicente do Mar. «Hay un par de zonas en las que los temporales están llevando mucha arena y dejan al descubierto las zapatas que soportan el paseo». La brigada de Obras está revisándolo para que no vaya a más.