El Rosalía de Castro de O Grove y el Magariños de Cambados, contra las aulas saturadas

R.E. O GROVE, CAMBADOS / LA VOZ

O GROVE

MARTINA MISER

La comunidad escolar meca se opone a la eliminación de una clase de tercero; la cambadesa reclama la creación de un nuevo aula de sexto

04 sep 2020 . Actualizado a las 19:17 h.

La de este viernes ha sido una mañana de movilizaciones a la puerta de dos de los colegios con más alumnos de la comarca de O Salnés: el Rosalía de Castro de O Grove y el Magariños de Cambados. En ambos casos, las protestas respondían a un mismo problema: aulas excesivamente pobladas, con 25 alumnos en ellas. En O Grove, el problema afecta a tercero de Primaria, donde se ha suprimido una clase. En el de Cambados, a sexto, donde los padres piden que se cree una tercera línea.

En el caso de O Grove, el problema se centra en tercero de Primaria, donde se han producido una serie de bajas entre el alumnado, lo que ha llevado a la Xunta a suprimir una de las dos clases y reunir a todos los chavales en una. «Este ano o total de alumnos é de 25, que Educación ten estimada como máximo para non crear dúas aulas, pero non compartimos esta decisión», dicen los padres, que han querido mostrar su «rotundo rexeitamento» a esa medida con una concentración a las puertas del centro. Explican sus razones. «Coa situación excepcional do momento, derivada da covid-19, a recomendación do Ministerio é a de crear aulas cun máximo de 15 alumnos, polo cal mantendo a división do terceiro curso, cumpriríase o encomendado». Si no se hace así, no es por un problema de falta de espacio, «pois hai aulas suficientes no centro educativo para manter as dúas de terceiro. Vemos un problema no relativo ao profesorado, pois non hai os docentes necesarios para cubrir as dúas aulas logo de que Educación decidira suprimir a praza que correspondería á segunda aula de terceiro». Y esa es, a juicio de los padres, una decisión incomprensible. «Si consideramos que o protocolo da Xunta indica que a biblioteca poderá ser usado ao 50 % do seu aforo, que o uso dos aseos estará limitado a un tercio e que o aforo máximo das salas de profesores estará determinado ao cumprimento da distancia de seguridade, non entendemos como para as aulas a determinación do aforo se cuantifica unicamente por superar ou on os 25 alumnos». Porque «unificar a aula de terceiro suporía contar con menos espazo para manter as distancias de seguridade recomendadas para evitar contaxios da covid-19, así como unha redución educativa para os nosos fillos».

MARTINA MISER

El caso de Cambados

El caso de Cambados es muy similar. Padres y estudiantes de sexto de Primaria se concentraron a las puertas del centro para mostrar «a súa disconformidade coa ratio de 25 alumnos por aula que se establece neste curso para os nosos fillos», especialmente teniendo en cuenta la situación sanitaria excepcional. Entienden que debería crearse una tercera clase de sexto, ya que las dos que se han formulado tienen 25 alumnos una, 24 la otra. Y eso podría cambiar a lo largo del curso, ya que el Magariños es un centro de referencia al que podrían incorporarse estudiantes durante el año. Hay demasiados estudiantes y deberán convivir, además, en espacios pequeños, ya que «as aulas son moi antigas e pequenas, e polo tanto non dispoñen do suficiente espazo para cumprir co distanciamento dos alumnos». El problema tendría fácil solución ya que en el centro, aseguran los padres, hay «aulas libres para poder acoller esta nova clase de sexto curso, e polo tanto non sería preciso realizar ningún tipo de inversión nin obras para poder mellorar e garantir a seguridade dos nosos fillos no centro educativo. Simplemente sería preciso por parte de Educación contratar un novo titor de forma temporal».