Las policías locales intensifican los controles por el uso de mascarillas

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

O GROVE

MONICA IRAGO

En O Grove, los agentes se desplazaron a A Lanzada para informar a los bañistas

18 jul 2020 . Actualizado a las 21:06 h.

El uso de la mascarilla es, desde hoy mismo, obligatorio en Galicia. Tanto en espacios abiertos como cerrados, siempre que haya otras personas deberemos vestir el protector facial: da igual si se cumple, o no, la distancia de seguridad. Este cambio de criterio fue anunciado por la Xunta el pasado viernes. Y este sábado ya se ha sentido su efecto: en mercados como el de Vilagarcía, el uso de la mascarilla era generalizado. En las calles, los rostros descubiertos eran muchos menos que en las jornadas anteriores. Y hasta en los accesos de las playas y sobre la arena se veían más caras tapadas.

Ese cambio lo han notado hasta las policías locales, encargadas de velar por el cumplimiento de esta medida. En O Grove, los agentes llevan ya días prestando una especial atención al uso de las mascarillas. Han multado a algunas personas -en la mayoría de los casos gente que previamente había sido requerida en varias ocasiones para que se cubriese nariz y boca- y hasta han recurrido a la megafonía exterior de los coches patrulla para llamar la atención a quienes se movían, sin ese elemento de protección, por zonas -como el paseo de Beiramar- en las que la aglomeración de gente es importante. Ayer, los agentes se trasladaron a la playa de A Lanzada, la más simbólica de O Grove, para advertir a los bañistas de que, desde este domingo, es obligatorio usar mascarilla también en el momento de acceder al arenal y en los paseos que por él se puedan dar. Los agentes informaron de ese control en sus redes sociales, y las respuestas no se hicieron esperar: usuarios de otros arenales, como As Barqueiras o Area Grande, reclamaban su presencia en dichas playas, porque en ellas «a situación mete medo».

La policía grovense no es la única que está informando a la población sobre las nuevas exigencias en el uso de la mascarilla. También el Concello de Vilanova ha hecho uso de sus resdes sociales para hacer apología del que es, desde ya, el correcto uso del protector facial. El nuevo escenario, dicen agentes consultados en todos los municipios de la comarca, es mucho más claro que el anterior, y les permitirá actuar con más diligencia. «Antes quedaban muchas cuestiones a la interpretación, y cuando entra la interpretación, se complica todo», explicaba un veterano policía municipal. «Agora é sinxelo: hai que levar máscara e punto», apunta otro agente. Saben que les espera algún que otro encontronazo con rebeldes sin causa que rechazan la mascarilla. Algunos ya los han tenido: en A Illa, han sido multadas dos personas que se negaban a utilizarla en un supermercado.