Los Grovemakers han sido capaces de reinventar el viejo suvenir y hacerlo arte
18 jul 2020 . Actualizado a las 12:40 h.El viejo imán con forma de concha que algún familiar lejano te trajo de sus últimas vacaciones, o la camiseta «pijamera» con la frase «Yo estuve en O Grove», han pasado a la historia de los recuerdos vacacionales. Ahora lo que se lleva son las cosas hechas a mano, los recuerdos útiles -por fin- que no acumulen polvo en algún recóndito lugar de la casa. Ahora lo que se lleva es visitar a los Grovemakers.
Esta asociación de artistas nació al amparo de una feria de emprendedores organizada por el concello de O Grove en el año 2017. Ahí se vieron las caras por primera vez, aunque algunos ya se conocían de haber coincidido en ferias. La idea que se plantearon fue sencilla: colaborar los unos con los otros para conseguir dar mayor visibilidad a los productos que elaboran. Así en 2018 se materializó Grovemakers como un colectivo integrado por hasta trece -quince en la actualidad-pequeñas marcas de todas las ramas habidas y por haber.
Por ejemplo, AWA se dedica a la realización de imaginativos diseños que plasma en camisetas, bolsas de tela y tazas, entre otros. Con frases a la gallega, como «Like a toxo» o «Lovely fento», su idea es que nuestra identidad «traspase fronteras». Desde Ruxe, crean bisutería artesanal, creativa y respetuosa con el medioambiente. Una conciencia ecológica que invade las creaciones de otra de las marcas A factoría Atelier, quienes recuperan y restauran muebles y otras decoraciones. Y así muchas otras marcas más, que según nos cuenta Leticia, secretaria de la asociación y creadora de AWA, «solo deben cumplir dos premisas, la primera es elaborar algo propio, es decir, nada de compra-venta. Por otro lado, la marca debe ser residente de O Grove. Queremos llevar el nombre de O Grove más allá de nuestras fronteras», señala.
Esa es quizá la clave por la que nació el proyecto, hacer ver a los vecinos y vecinas que en O Grove van a encontrar todo lo que necesitan y así apoyar el comercio local. «Y ahora más que nunca», señala Leticia refiriéndose a la situación tras el covid-19, «si no nos ayudamos entre nosotros, mal vamos».
El grupo confiesa que esta nueva normalidad les daba «un poco de miedo e incertidumbre». Sobre todo porque Grovemakers abrieron el año pasado una tienda en la calle Castelao y no sabían a que atenerse tras la vuelta a la normalidad. Leticia asegura que por el momento el turismo está ayudando a la remontada, «a la gente le gusta llevarse un recuerdo de aquí».
La asociación es muy activa en sus redes sociales, por eso, durante la cuarentena jugaron con sus seguidores colgando sopas de letras y otros retos. Leticia señala que fue durante esta etapa cuando se les ocurrió la iniciativa «Sen saír do Bao», una campaña que se estructura a través de minivídeos publicados en Instagram donde la asociación da visibilidad a otros negocios de O Grove bajo la campaña #MercaNoGrove. «Fue proponer la idea y recibimos un montón de solicitudes de empresas o marcas que querían participar en ella», asegura. De esta manera podemos encontrarnos con las ofertas de O forno de Piñeiro, panadería artesana; Pescados Jesy, situado en la plaza de abastos; la Clínica Sanitaria Orixe, de fisioterapia, y muchas ofertas más.