El pleno se reunió para aprobar el proyecto y lograr, así, que el 80% de la reforma de la vía corra por cuenta del Gobierno central
10 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El pleno de la corporación de O Grove se reunió ayer para aprobar el proyecto de reforma de la calle Beiramar, en el tramo que discurre entre la cofradía y la rotonda de las garzas. Esa zona es, sin duda, uno de los puntos neurálgicos de la localidad, y el Concello quiere actuar en él para conseguir dar fluidez a la circulación rodada por el centro urbano, definitivamente trastocada con la peatonalización de Castelao.
Abrir ese tramo de Beiramar a los dos sentidos de circulación es el objetivo primordial de un proyecto valorado en 126.500 euros. Sin embargo, ese no es el único cambio que va a registrar esta vía. Y es que, con la calzada ampliada y las aceras visiblemente mejoradas, llegan más novedades: la calle se convertirá en la primera de O Grove «dotada con un sistema instalado para la recarga de coches eléctricos». Cuando rematen los trabajos, la instalación quedará hecha. Queda pendiente, explicaba ayer el regidor socialista, definir cómo se gestionará un servicio que parece, a priori, cargado de futuro. El cambio de la iluminación en toda la zona, sustituyendo las luminarias actuales por otras de tecnología LED, es otra de las mejoras que experimentará una calle que discurre en paralelo a la plaza de O Corgo. Para evitar que el tráfico se convierta en un problema, se instalarán tres badenes: uno a la altura de las garzas, otro en el punto en el que desemboca Xacobe Barral y un tercero a la altura del actual paso de peatones.
Para conseguir todos estos objetivos será necesario retranquear aceras e invertir 126.500 euros, un dinero que el Concello quiere conseguir del Estado. Parece estar en el camino de hacerlo.
Reformar la explanada de O Corgo consumiría unos 80.000 euros
Si no hay cambios, la ayuda del ministerio permitirá a O Grove disponer, de nuevo, de unos 100.000 euros del plan Concellos que había reservado inicialmente para esta actuación en Beiramar. Ese dinero, sugería este fin de semana Esquerda Unida, podría dedicarse a reformar la plaza de O Corqo, que ofrece una imagen muy deteriorada, con las losetas levantadas y convertidas en un peligro para los viandantes. El alcalde coincide con EU: ese espacio necesita una reforma, y ya. En ese sentido, recuerda que esa actuación fue solicitada a la Xunta -el terreno es de Portos- el pasado octubre. Y en esa línea sigue el alcalde: la actuación costaría unos 80.000 euros «Esa es responsabilidad de Portos. Nosotros ya vamos a asumir la obra en Beiramar, sin ni siquiera pedirles un euro, y teniendo que esperar una eternidad por su autorización. Algo le tocará hacer a ellos».