La compañía asegura que busca minimizar el impacto del nuevo plan de transporte, a expensas de que la Xunta lo autorice
10 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Un día. Este es el tiempo que han durado en su formulación original los horarios de la nueva línea de autobús que desde el martes recorre las carreteras de O Salnés para unir Vilagarcía y O Grove. Ayer, el grupo Monbus, operador de la ruta, decidió introducir una serie de modificaciones. El objetivo, señalan fuentes de la empresa, es minimizar el impacto de la entrada en vigor del renovado plan de transporte, que ha dejado en tierra y sin combinaciones a decenas de pasajeros a lo largo y ancho de la comarca. Se trata, reconoce la compañía, de una medida que adopta por iniciativa propia y siempre a expensas de que la Dirección Xeral de Mobilidade lo autorice.
La principal de estas novedades consiste en recurrir a la línea que comunica O Salnés con Santiago, cuya titular es Castromil, integrada desde hace años en el poderoso grupo lucense. Los horarios difundidos el martes, que apenas contienen tres frecuencias diarias entre Vilagarcía, Cambados y O Grove, se complementan ahora en la estación de la capital arousana con los de los buses que van y vienen de Compostela. Se trata de otros tres viajes diarios en cada sentido, con lo que el número de frecuencias, en días laborales, pasaría de tres a seis.
Sin embargo, existen inconvenientes que de momento no han sido aclarados. Hace meses, la Xunta aseguró que las dos concesiones, la interna de O Salnés y la de Santiago, no pueden solaparse, a riesgo de que Monbus acabe haciéndose competencia a sí mismo. La dirección xeral tendrá que precisar, por lo tanto, si ese veto para la recogida de viajeros en recorridos intermedios ha sido levantado. Lo que el departamento autonómico sí anunció ayer es que supervisará la forma en la que se está prestando el servicio en toda Galicia, garantizando que exigirá a las concesionarias su cumplimiento, de ser necesario. Por lo demás, la Xunta argumenta que se trata de una fase de implantación, por lo que los horarios podrán ser alterados para que se ajusten a las necesidades de los usuarios del autocar. Sucede que incluso con la incorporación de las frecuencias de Santiago, el primer bus hacia Cambados y O Grove no partirá de Vilagarcía hasta las 12 horas. Así que las quejas prosiguen. La falta de información precisa sobre los horarios, también. «Es un disparate», señalaba un viajero, bloqueado anoche en Vilanova.
«Temos que facer un plan comarcal»
«Isto non é o que nos venderon para mellorar a interconexión da comarca e o transporte público. Temos que facer un plan de transporte comarcal, porque isto non fai senón empeorar. Non é comprensible que dos oito servizos que unían Cambados e Vilagarcía pasemos a tres».
«Va contra la realidad social y económica»
«No podemos estar contentos. Es un sistema inconexo que no cohesiona el territorio y va contra los intereses y la realidad económica y social de la comarca. En O Grove hay gente que se gasta diez euros en un taxi para poder ir desde San Vicente al centro a la consulta del médico».
«No hay información sobre los horarios»
«En Vilanova -Durán es su alcalde- el principal problema que constatamos es la falta de información sobre los horarios, que ya le hemos reclamado a Monbus, porque no había nada de nada. La gente se ha quejado a la Policía Local y lo lógico es que la empresa informe de todo esto».
«Que manteñan polo menos o que había»
«Vese como hai Administracións, coma o Concello de Vilagarcía, que apostan polo transporte público, e outras que non. Agardemos que a Xunta rectifique todo isto, porque non pode ser que se reduzan as frecuencias a Cambados e O Grove de oito a tres. O mínimo é que manteñan o que había».
«Que a Xunta se poña mans á obra»
«A mobilidade non é un tema menor, é unha cuestión relevante para o día a día das persoas e para a nosa economía. Lonxe do que fai a Administración autonómica, non os vou criminalizar, pero fago un chamamento para que se poñan mans á obra. Se non, haberá que tomar outras decisións».