El fiscal pide para el excontable de la cofradía de O Grove seis años de cárcel por malversación

Rosa Estévez
r. estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

O GROVE

MONICA IRAGO

Propone además que indemnice al pósito con 577.075 euros tras el agujero causado en sus cuentas

10 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Ministerio Fiscal interesa la inmediata apertura de juicio oral, por el sistema del jurado popular, contra Fabricio Fernández, excontable de la cofradía de O Grove. Le imputa un delito de malversación de fondos públicos, al considerar que «obrando con ánimo de ilícito enriquecimiento, faltando al deber de lealtad para con la cofradía de la que era empleado, y aprovechando la circunstancia de tener acceso a las cajas y cuentas bancarias de la entidad por su condición de encargado del área económica, concibió el plan de ir haciendo suyas paulatinamente diversas cantidades de euros durante los años 2009 y 2010, logrando incorporar a su patrimonio un total de 505. 515 euros».

Parte de ese dinero fue escamoteado de las ventas de la pescadería de O Grove. Otra parte la sacó de los bancos con los que trabajaba la cofradía y que, según el Fiscal, actuaron con negligencia al entregarle diversas cantidades tanto por ventanilla como mediante operaciones telemáticas, pese a no estar las operaciones avaladas por la firma del entonces patrón mayor, Francisco Iglesias. Por todo ello, el Fiscal considera responsables civiles de lo ocurrido al Banco Santander y a Caixabank.

En el escrito del Fiscal se tiene en cuenta que «como consecuencia de las operaciones llevadas a cabo por el acusado, la cofradía se puso en una delicada situación económica y de falta de liquidez, lo que le impidió cumplir con algunos de sus deberes fiscales. Es el caso de una tasa por las ventas en lonja de los años 2009 y 2010 que hubo de pagar a posteriori y con recargo.

El Fiscal ha echado cuentas y plantea que, por la vía de la responsabilidad civil, Fabricio Fernández abone a la cofradía un total de 577.075 euros, una cantidad equivalente a la sustraída y a las pérdidas sufridas por el pósito a raíz de este caso. También pide para el excontable una pena de seis años y un día de prisión.

Ludopatía

Esa petición de condena se formula pese a reconocer que «el acusado, en el momento de cometerse los hechos, estaba aquejado del trastorno del control de impulsos conocido como ludopatía». Un trastorno que lo llevó, por ejemplo, a gastar 47.400 euros en el Casino La Toja entre el 7 de marzo de 2009 y el 7 de abril de 2010.

Pese a ser evidente su ludopatía, el Fiscal entiende que el excontable del pósito tenía «intactas sus capacidades intelectivas o de entender, si bien tenía limitadas sus capacidades de actuar conforme a dicha comprensión exclusivamente en lo referente a los juegos de azar».