O Salnés afrontará el verano con su red de suministro de agua al límite

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

O GROVE

MARTINA MISER

La masiva llegada de turistas pondría en jaque la potabilizadora y la tubería a O Grove

25 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras una Semana Santa que batió marcas, el sector turístico arousano se frota las manos esperando el verano. Y es que «si el tiempo acompaña, esperamos volver a tener unos resultados de récord». Quien así habla es Ramón García Guinarte, el gerente de la Mancomunidade do Salnés. Son buenas noticias, sí. Aunque en ese horizonte soleado hay una sombra que inquieta, y mucho: el agua.

Estamos viviendo el mes de abril más seco de, al menos, lo que llevamos de siglo. Cinco de las seis estaciones meteorológicas que MeteoGalicia tiene en la zona solo registraron un trazo de lluvia un día de este mes; en Armenteira llovió dos veces. Y el verbo llover no se ajusta demasiado a unos datos que oscilan entre 0,1 y 0,6 litros por metro cuadrado. Entre este abril de aguas cero y que el embalse de Caldas está a poco más del 50 % de ocupación, es normal que en algunos concellos se hayan encendido las alarmas.

Desde la mancomunidad, Guinarte llama a la calma. «En el río Umia no se han registrado problemas de nivel de agua», sentencia. Pero eso no es óbice para que haya que preocuparse: la planta potabilizadora de aguas se ha quedado pequeña y, si se produce una llegada masiva de veraneantes va a tener que trabajar durante las 24 horas. El verano pasado ya fue así, y aguantó el tirón. ¿Podrá soportar ese sobreesfuerzo un verano más? Desde la Mancomunidade confían en que así sea. No hay nada que indique lo contrario. Saben, eso sí, que se avecinan unos meses en los que la vigilancia va a tener que ser constante, los ajustes milimétricos, jugando siempre con el as en la manga de dar más protagonismo al agua que Sanxenxo recibe de Pontevedra si las cosas se ponen feas por O Salnés. En todo caso, desde la comarca tienen algo claro: duplicar la potabilizadora es una obra urgente, prioritaria y que no puede aguardar más.

Los concellos arousanos no ocultan cierta preocupación ante este inusitado clima de sol y calor. En Vilagarcía, si bien insisten en que no hay motivo de alarma, reconocen estar siguiendo con atención todas las recomendaciones de la Xunta. El concejal Lino Mouriño pedía ayer a los vecinos que hagan un uso razonable del agua, algo que, si bien se debe llevar a la práctica durante todo el año, cobra especial relevancia ahora.