La presión continúa creciendo sobre la vía que articula la comarca

Serxio González Souto
SERXIO GONZÁLEZ VILAGARCÍA / LA VOZ

O GROVE

La arteria que une O Grove y Sanxenxo con la AP-9 registra una intensidad de trece mil vehículos diarios, que sube un 10 % cada año

01 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La historia de esta compleja infraestructura se inició en 1993, con la inauguración de una vía rápida -denominación que pronto cayó en desgracia por lo que sugería de velocidad- entre Curro y Sanxenxo, que siete años después se prolongaba a O Grove. Hubo que aguardar hasta el 2008 para que este tronco central duplicase su calzada y sumase cuatro carriles, mereciendo la denominación de autovía. Paralelamente, ramales y rotondas se extendían hacia Cambados, A Illa, Vilanova y Vilagarcía. En su caso, limitados, eso sí, a un carril por cada sentido de circulación. Pese a tan sinuosa trayectoria y la sospecha generalizada de que en realidad nació para conectar Sanxenxo con la autopista, el paso del tiempo ha ido consagrando esta carretera como una arteria capaz de articular las comunicaciones terrestres de O Salnés.

Los últimos datos que la Consellería de Infraestruturas e Vivenda maneja acerca de la Autovía do Salnés confirman que el tráfico continúa creciendo en todos sus tramos, y que lo hace a un ritmo próximo al 10 % anual. Las secciones más transitadas coinciden con su inicio, en el nudo de Curro, que cada día recorren 16.445 vehículos. Esta presión se mantiene entre Mosteiro y Ribadumia, para decaer un tanto, hasta los 13.462 desplazamientos, entre Meaño y la bifurcación que divide la circulación entre los vehículos que se dirigen a Sanxenxo y los que lo hacen a San Vicente y O Grove.

Peligro hacia A Lanzada

La lectura de la consellería permite comprobar que 13.586 vehículos desembocan cada día en Sanxenxo, procedentes de la autovía. Tampoco es una minucia la cifra de desplazamientos que registra la carretera de A Lanzada: 10.281. Teóricamente, ambas tendrían que haber sido ya conectadas a través de una nueva ampliación de la vía de alta capacidad de O Salnés. Sin embargo, 24 años después, la autovía todavía está incompleta. La prolongación entre Sanxenxo y O Grove, un punto negro de elevadísima siniestralidad, jamás ha logrado superar la fase de proyecto.