La edila Enma Torres ha activado el plan para regularizar a este colectivo
30 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Hace ya seis años que el Concello de O Grove aprobó una ordenanza que regula la actividad de las collareiras, las personas que se dedican a la venta de joyas diseñadas con conchas en las calles de la localidad. Desde entonces, se ha trabajado en la elaboración de un censo que incluya a todas estas profesionales y en tareas de vigilancia para comprobar que se cumple con el nuevo reglamento. Pero, hasta ahora, no se había ejecutado la necesaria renovación de las autorizaciones. Ahora, la concejala de Turismo, Emma Torres, ha decidido poner en marcha este proceso y, para ello, invita a la profesionales a una reunión informativa.
Explica Torres que, según el censo municipal, ocho collareiras trabajan actualmente en la zona de Beiramar, mientras que otras 49 lo hacen en la isla de A Toxa. En el Concello tienen constancia de que no todas estas profesionales están activas. Pero es que, además, el reglamento establece que las autorizaciones deben renovarse cada dos años. Y este paso no se ha llevado a cabo en los últimos tiempos. Es por ello que ahora el nuevo gobierno local quiere dar el paso y renovar las autorizaciones concedidas en su día.
Siendo consciente de que el proceso entraña su complejidad, el grupo de gobierno quiere ayudar a estas vendedoras a tener en regla toda su documentación y a superar el trámite de la renovación. Por eso las ha convocado a una reunión, que se celebrará a las ocho y media de esta tarde en la sala de As Cunchas. Allí se les informará de toda la documentación que precisan presentar para poder renovar las autorizaciones que les permitan seguir desempeñando el trabajo de collareiras. Se trata, en todo caso, de un proceso meramente administrativo que viene ya recogido en el reglamento actual, explica la concejala. Torres aprovecha la oportunidad para recordar que la ordenanza municipal que regula esta actividad se creó con el objetivo de ayudar a la conservación de una actividad tradicional de la localidad grovense. «O cambio das concesións está limitado, polo tanto, aos familiares directos dos titulares e tamén ao cumprimento da referida normativa», argumenta la responsable de Turismo.