Tragedia en Meis: «Houbo un ruído tremendo e a moto saíu voando»

Bea Costa
Bea Costa MEIS

MEIS

Martina Miser

El accidente tuvo varios testigos que a esa hora estaban en las terrazas de los bares situados al pie de la carretera

17 sep 2022 . Actualizado a las 20:57 h.

«Foi dantesco». Así resume la alcaldesa de Meis, Marta Giráldez, lo ocurrido anoche en la recta de A Goulla, y es que ella también estaba allí. La casualidad hizo que se encontrara por la zona y diez minutos después del siniestro se presentó en el punto. Las escenas a las que asistió fueron terribles, señala. La moto por el suelo, unas zapatillas tiradas en la calzada, el perro que viajaba en la moto muerto... Lo peor, cuenta, fue la espera mientras reanimaban en la ambulancia a la chica más joven, que acabó falleciendo. Nadie se movía y la fatal noticia llegó. Mientras, su tía, a la que atendían los facultativos, no dejaba de preguntar por su sobrina, según relata la alcaldesa. La regidora no llegó a aproximarse a ellas, pero sí lo hicieron amigos suyos, que las cuidaron y consolaron como pudieron. Hubo escenas de rabia e impotencia, también hacia el conductor del coche, al que le increparon por su forma de conducir «e hai quen di que a ambulancia tardou demasiado, non sei, neses momentos todo faise eterno», apunta Marta Giráldez.

Hubo testigos oculares del suceso porque a esa hora, pasadas las nueve de la noche, las buenas temperaturas invitaban a tomarse una cerveza en las terrazas de la cafetería A de Loli y la pulpería-asador Ruedo, situadas al pie de la carretera. «Houbo moito ruído e a moto saíu voiado», cuenta Loli, la propietaria del bar. Fernando, camarero en el Ruedo, no llegó a ver el accidente, pero unos segundos antes del impacto sí vio pasar el Porsche a gran velocidad en dirección a Vilagarcía. Después oyó un fuerte ruido, se asomó a la carretera y se encontró con el horror. A partir de ahí el caos se adueñó del lugar. La clientela salió corriendo a acudir a las mujeres tiradas en el asfalto y empezó a formarse un atasco que se prolongaría hasta pasada la medianoche. A las once y media todavía se estaba a la espera de que llegara el forense para proceder al levantamiento del cadáver y a la una de la mañana, la Guardia Civil seguía regulando el tráfico en el punto.

Las personas a las que les tocó vivir de cerca este suceso se fueron para cama con el corazón en un puño y esta mañana el accidente era el tema de conversación en los bares y en el resto del municipio. Aunque el comunicado de la Guardia Civil sitúa a la tía de la víctima mortal en Caldas, se comentaba que vivía en Armenteira, extremo que corrobora la alcaldesa tras interesarse por la cuestión. No obstante no era muy conocida en la parroquia porque no hace mucho tiempo que se instaló en la zona.