Los alcaldes reparten mascarillas puerta a puerta, los vecinos, agradecidos, y alguno aprovecha para preguntarle al médico

Bea Costa
bea costa VILAGARCÍA/ LA VOZEN BREVE

MEIS

MARTINA MISER

Marta Giráldez y Gonzalo Durán recorren esta semana sus municipios para ayudar en la entrega del material

16 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Gratitud. Ese es la principal sentimiento de los vecinos cuando el personal municipal acude a sus casas para entregarles las mascarillas con las que protegerse del coronavirus. Y si el que llama a su puerta es el alcalde, no falta el factor sorpresa. Acostumbrados a que los políticos solo hagan acto de presencia para pedir el voto, el hecho de que se impliquen de una manera tan directa ante una situación como la actual está siendo bien recibida por los ciudadanos.

La alcaldesa de Meis, Marta Giráldez, empezó ayer un recorrido por el municipio que se prolongará, en el mejor de los casos, hasta el fin de semana. Dedicó toda la mañana a recorrer las casas de San Salvador, mascarilla en mano, acompañada de las concejalas Araceli Maquieira y María Sancho, mientras cuatro trabajadores municipales hacían lo propio por Armenteira, San Martiño y Paradela.

Queda mucho camino por delante, no en vano Meis ocupa 52 kilómetros cuadrados distribuidos en siete parroquias y con núcleos de población muy dispersos. «Aquí non sorprende. Nun concello coma o noso funciona a política del ‘tú a tú’, para min é un gusto poder axudar aos veciños nun momento coma este», señala la regidora. El Ayuntamiento ha distribuido ya cerca de un millar de mascarillas confeccionadas por costureras de forma casera y ahora acaba de comprar a una empresa 4.800 más, estas de tejido TNT, con el objetivo de que todos los habitantes de Meis dispongan de este material, que es lavable y reutilizable.

La misma meta se han puesto en Vilanova, donde el lunes empezaron a repartir mascarillas, también casa por casa y con el alcalde y los concejales sobre el terreno. «Tenemos que estar en primera línea con los vecinos como estuvimos durante el Prestige», señala Durán, quien, además de político, está ejerciendo estos días más que nunca como médico. «Cuando me ven, la gente aprovecha para hacer consultas médicas», relata, y, si es necesario, cruza el umbral y visita a algún enfermo en la cama. El regidor va bien provisto de mascarilla y guantes y, por supuesto, no deja de hacer recomendaciones sobre como deben usarse las mascarillas y de la necesidad de quedarse en casa.

En Vilanova han adquirido a 12.000 mascarillas de gore-tex y esperan ampliar existencias hasta las 15.000 unidades.