En quince días, esta parroquia de Meis logrará que todos los ojos se vuelvan hacia su Semana Santa
11 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.En Paradela, la Semana Santa es mucho más que unos días festivos pintados en el calendario. Es mucho más, incluso, que una época cargada de simbolismo religioso. En Paradela, la Semana Santa es ese momento del año en el que se dispara el orgullo local, en el que los vecinos aparcan diferencias para disfrutar de unos actos que han convertido el pequeño lugar en el que habitan en uno de los puntos de más interés de toda Galicia.
El grueso del programa no deja margen a muchas sorpresas: dos mil años de tradición nos contemplan; el guion no se cambia. El telón se alzará el domingo de Ramos, con la escenificación de la entrada de Jesús en Jerusalén (12.30 horas). El jueves Santo (29 marzo), a las diez de la noche, se escenificará la última cena en el atrio de la iglesia, la detención de Jesús y el juicio del sanedrín. Y al día siguiente (11.30 horas) se escenificarán sus últimas horas de vida, el Vía Crucis y la crucifixión en el Monte da Croa. A las diez de la noche, se representará el desenclavo, seguido de la procesión del Santo Enterro.
Paradela se despedirá de la Semana Santa el Domingo de Pascua, el 1 de abril, con la escenificación de la resurrección. Será a las doce y media, en el atrio de la iglesia. A continuación, habrá misa cantada y procesión, acompañada por la Banda de Música de Meis.