Las instalaciones que utiliza -la parte baja del escenario de la plaza del pueblo- no reúnen las condiciones de seguridad debido a los altos índices de radón registrados en este espacio
24 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.La Banda Unión Musical de Meaño emitió la semana pasada un comunicado de prensa como último recurso en busca de una solución ante la carencia de un local de ensayo. El problema no es nuevo porque las instalaciones que utiliza para este fin -la parte baja del escenario de la plaza del pueblo- no reúnen las condiciones de seguridad debido a los altos índices de radón registrados en este espacio.
El Concello se comprometió a realizar obras para aislar y acondicionar el local y evitar así que este gas represente un problema para la salud de los músicos, pero los trabajos aún no han empezado. Según informan en el Concello, la obra está adjudicada, a la espera de que den comienzo los trabajos.
La situación se complica con la obligación de guardar distancias por el covid-19. Sus 85 músicos -lo que la convierte en una de las agrupaciones más numerosas de Galicia- no caben en local, lo cual supone tener que ensayar en grupos reducidos.
La solución de Xil, «inviable»
La agrupación propuso como alternativa utilizar el pabellón de Xil, mediante la construcción de un escenario desmontable de grandes dimensiones. Pero esta actuación requiere una inversión de 150.000 euros y el alcalde de Meaño, Carlos Viéitez, ya ha dicho que es inviable.
Ante esta situación, la opción que plantea la directiva de la asociación que gestiona la banda pasa por alquilar un local dentro o fuera del municipio, con el apoyo económico del Concello. Pero hay más escollos que el dinero.
No hay muchos locales con capacidad suficiente para albergar los ensayos de toda la banda guardando el preceptivo metro y medio de distancia, de modo que en la banda ya se darían por satisfechos si encontraran un emplazamiento para dar cabida al 50 % de sus músicos. En mente están las grandes bodegas de la comarca, que cuentan con amplios salones de actos, pero ni siquiera por esa vía va a ser fácil dar con una solución debido a los protocolos de seguridad que lleva aparejados la pandemia. En cuanto a la escuela municipal de música, la previsión del Concello es que las clases comiencen el día 1 de octubre.