Las arousanas derrotaron a domicilio a un rival directo por la permanencia
12 sep 2017 . Actualizado a las 13:06 h.Llegar, ver, y vencer. Así se estrenó el pasado domingo el Asmubal Meaño en la División de Honor Plata, la segunda categoría del balonmano femenino español, a la que accedía el pasado verano aceptando una invitación cursada desde la Real Federación Española de Balonmano. Las pupilas de Víctor Garrido superaron a domicilio 23-27 a otro recién llegado a la Liga, el Siero Deportivo Balonmano, este por méritos deportivos. Lo hicieron en un partido en el que se probaron francamente superiores, dominando el marcador de principio a fin a excepción de un par de empates iniciales, y llegando a ganar por 13 goles de diferencia mediada la segunda parte.
Y ello, a pesar del nerviosismo lógico con el que salieron a la pista las jugadoras arousanas, y a la inferioridad numérica con la que tuvieron que lidiar durante los primeros 20 minutos de partido, en el que el Asmubal tuvo que competir un par de veces con cuatro frente a seis.
«O equipo soubo respostar, o Siero nunca se deu posto por diante, só empatar», comentaba ayer Víctor Garrido. Al descanso, 9-16. Y a la vuelta a la cancha asturiana, un primer cuarto para enmarcar del Asmubal Meaño, que secó por completo el ataque de su rival para irse a la máxima diferencia del partido: 9-22.
Fue entonces cuando desde el banquillo local pensaron aquello de de perdidos, al río. «O seu adestrador arriscou con todo», relata Garrido, «puxo a sétima xogadora de campo -retirando al portero, como en el fútbol sala, en virtud de la nueva normativa de competición-, e pasou dun 6-0 a unha defensa dobre mixta sobre Raquel Sineiro e sobre Erika Franco». Y la cuestión es que «acabamos un pouco desanimados. Pasamos de gañar de 13 goles a case pedir a hora a pesar de rematar 23-27».
Este último es el único lunar apuntado por el preparador del Asmubal Meaño en el histórico debut de su equipo en la División de Honor Plata, quedándose con los 45 primeros minutos de partido. Esos en los que el cuadro de O Salnés fue capaz de desarbolar al Siero «con rápidos balances e contragolpes, e xogando moito coa nosa pivote, Sara, e coas nosas extremos», con una decena de tantos gallegos llegando desde las puntas del borde del área local.
Así las cosas, en el cómputo global «estou moi contento», apunta Víctor Garrido, «confirmamos as sensacións da pretempada, de que temos moi bo equipo. Estivemos moi ben en labores de defensa, e na transición, que considero fundamental nesta Liga. E gañamos fóra da casa, contra un rival directo. Non se pode pedir máis».
Primer partido en casa
La alegría por el triunfo deja hoy paso a la vuelta al trabajo. Con la vista puesta ya en el primer partido del Asmubal Meaño en el Pabellón de Coirón como equipo de División de Honor Plata. Será este sábado, a partir de las seis de la tarde, con el CLEBA León, gran favorito al ascenso junto al Oviedo y primer líder de una clasificación en la que el Asmubal se estrena tercero.
FICHA:
SIERO (23): Sarai, Alba (4), Lucía (1), Cristina Sánchez (2), Sandra, Cristina Quidiello (5), Odile (4), Cristina Pevida, Paula Solís (6), María, Julia, Paula Fernández, Mara y Andrea (1)
ASMUBAL MEAÑO (27): Mónica Sineiro, Iria Padín, María Fresco (6), Lorena Ligero, Laura Miniño (3), Beatriz Barreiros, Erika Franco (4), Paula Reiriz, Sara Domínguez, Raquel Sineiro (7), Andrea Cores (4), Vanesa Domínguez, Victoria Domínguez y Sara Estévez (3)
Árbitros y exclusiones: Javier Quesada y Laín Montes. Decretaron dos exclusiones al Sieiro, por nueve al Asmubal Meaño.