El aspirante conservador a la alcaldía arrancó un cartel del BNG en un vídeo en el que reprocha a su rival nacionalista que no acudiese a un debate televisado. El Bloque lo usará como prueba ante la junta electoral
18 abr 2023 . Actualizado a las 20:54 h.Catoira es, desde hace cuatro años, terreno minado en materia electoral. El resultado de los anteriores comicios municipales dibujó un escenario refractario a la estabilidad, con la pérdida de la mayoría absoluta por parte del PSOE de Alberto García, y un empate técnico entre el BNG y el Partido Popular. El popular Iván Caamaño votó al nacionalista Xan Castaño, lo que permitió que, por primera vez, el Bloque asumiese una alcaldía que siempre había desempeñado el PSdeG. García, de hecho, permanecía en el cargo desde 1989. La novedad tampoco salió bien, ya que, un año más tarde, conservadores y socialistas negociaron una moción de censura que, aunque naufragó, desplazó a Castaño del bastón de mando para devolvérselo al veterano regidor del puño y la rosa, cuyo grupo municipal saltó por los aires. Con este ambiente como escenario, no es extraño lo que acaba de ocurrir: que una denuncia del PP amenace con volverse en su contra, antes incluso de que la campaña asome en el horizonte.
El origen del conflicto es un debate de carácter electoral, que el Canal Rías Baixas grabó esta semana. A él habían sido invitados los tres candidatos que competirán por la alcaldía catoirense. Sucede que Alberto García, el alcalde, ni siquiera se presentó en el plató, lo que llevó a Xan Castaño a renunciar a participar en el programa, aunque se encontraba ya en las instalaciones en las que se iba a desarrollar el encuentro. Lo hizo por considerar que un acto de estas características sin el regidor constituiría un fraude para los vecinos de Catoira, aguardando que ese cara a cara a tres bandas pudiese tener lugar antes del 28 de mayo.
Iván Caamaño se convirtió, así, en el único candidato de un debate consigo mismo y dos rivales ausentes. El portavoz popular se lo tomó bastante mal. En especial, la decisión de Castaño de ausentarse del encuentro, algo que considera una burla hacia el pueblo de Catoira. Sucede que, en el vídeo en el que criticó con dureza al nacionalista, el conservador echó mano de un cartel que el BNG había colocado en uno de los paneles públicos que el Concello ha instalado para acoger todo tipo de información municipal. Lo hizo tras asegurar que ocultaba el anuncio del debate, en un supuesto intento del Bloque por que pasase desapercibido. Y, claro, la respuesta no ha tardado en llegar: «O BNG vén utilizando desde hai moitos anos os paneis colocados en todo o concello como un medio máis para expoñer a súa posición política. O que non é admisible é que o candidato do PP, Iván Caamaño, arrinque a información que colocan outros partidos políticos e que o faga con esa chulería e desprezo e por riba gabándose do que fai». El siguiente capítulo se escribirá ante la junta electoral de zona, que, aunque probablemente haya pasado desapercibido, se ha constituido el día 6.
