Rubén vuelve a A Lomba con el Compos alabando la apuesta por su excantera

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

CATOIRA

MONICA IRAGO

El extremo confía en poder enfrentarse el domingo al equipo en el que se formó

04 nov 2016 . Actualizado a las 05:05 h.

Quién sabe si de haber dicho sí a la oferta de renovación del pasado verano en las oficinas de A Lomba hoy sería él, y no un Eloy por el que siempre apostó Piscis, el que ocupase el carril izquierdo del ataque del Arousa. Pero al igual que en el arranque de su primera temporada como sénior, cuando optó por buscar con acierto minutos de juego en aquel sorprendente y fugaz Xuventú Sanxenxo, Rubén Martínez (Catoira, 28/X/1994) decidió descartar la opción arlequinada, e intentar avanzar en su carrera lejos del equipo al que llegaba con 14 años procedente del Catoira. El domingo, si su entrenador, Yago Iglesias, lo estima oportuno, podrá enfrentarse a muchos de los que fueron sus compañeros de vestuario en A Lomba la pasada campaña, solo que con el extremo izquierdo vikingo luciendo el blanco y azul de la camiseta del Compostela.

«Si. A verdade é que é un partido especial para min», decía ayer Rubén Martínez, que tras figurar entre los descartados del técnico compostelanista la semana pasada frente al Barco, con derrota santiaguesa por 2-3, confía en poder saltar al césped de su antiguo estadio.

Con tan solo 215 minutos de juego esta temporada, el exarousista es el sexto jugador menos usado por Yago Iglesias; con matices. «Este verán déronme no Compostela a oportunidade de facer a pretempada. Non o dubidei». La pena, recuerda Rubén Martínez, es que «contra o final da pretempada me lesionei, unha rotura no cuádriceps da perna esquerda, e estiven arredor dun mes parado». Una lesión de lo más inoportuna, por cuanto lo retrasó en la pelea en una plantilla «con moita competencia», comenta. Por ello, «cando regresei tiven que agardar moito» hasta conseguir una oportunidad. La primera, contra el Racing Vilalbés, el 9 de octubre, con triunfo compostelanista por 1-0 y él jugando todo el partido. Tres titularidades encadenó, con el Bergantiños abriendo además el 4-2 en San Lázaro. El Silva fue el último rival al que se midió.

Rubén Martínez se muestra «moi contento» por hallar un hueco en un histórico del fútbol gallego que mezcla «veteranía e mocidade» y juega «sen presión». Y también por ver la apuesta de Jorge Otero por los de casa: «O Arousa ten unha moi boa canteira, e debera ter apostado así por ela antes», declara.