La saga de los «Chelines» se reunió en Cambados

La Voz CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

Mónica Irago

Casi un centenar de descendientes de Ángel Sineiro disfrutaron de una comida en el parador

04 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Ángel Sineiro Vidal tiene la culpa de que su prole sea conocida como los Chelines. Fue porque cuando regresaba de sus viajes por el mundo pagaba en el bar con chelines, y aquello no cayó en saco roto. Sineiro acabó siendo el Chelín que, en el habla cambadesa derivó en Chilín, y Chelines fueron sus hijos y sus nietos. Quizás a la pequeña de la saga, la tataranieta Clara de tan solo 18 meses de vida, ya no lleguen a llamarla por el mote, pero, por de pronto, ayer estaba convocada junto a los 97 descendientes de Ángel Sineiro.

Ángel Sineiro
Ángel Sineiro

Con el paso de los años otros apellidos se fueron sumando al árbol genealógico —Daporta, Chantada, Mouriño, Álvarez y Galiñanes— y de todo ellos hubo representación en la comida celebrada en el parador de Cambados. Mucho mejor verse ahí que en los funerales.