Ingresan en prisión el líder de la trama arousana de narcolanchas y siete colaboradores

Serxio González / Javier Romero CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

Martina Miser

La jueza de Cambados, tras prestar declaraciones los detenidos durante más de 12 horas, ordenó su traslado a la cárcel de A Lama acusados de organización criminal, contrabando de género prohibido y tráfico de drogas

09 abr 2022 . Actualizado a las 20:05 h.

La jueza titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Cambados decretó en la noche del viernes prisión provisional comunicada y sin fianza para ocho de los implicados en la red que fabricaba narcolanchas en Arousa. Entre ellos figura el presunto líder de la trama, Pablo Vázquez, y siete de sus considerados colaboradores. Otros cuatro detenidos fueron puestos en libertad, aunque se les ha retirado el pasaporte, prohibido abandonar el territorio nacional y deberán comparecer cada vez que sean llamados. Los 12 están investigados por un delito de contrabando continuado, otro de pertenencia a organización criminal y un tercero contra la salud publica. La tesis policial y judicial considera la trama desmantelada, tras 20 arrestos, otras tantas embarcaciones ilegales decomisadas y 25 registros autorizados, la más activa en Galicia en lo referido a la fabricación de estos botes construidos únicamente para el tráfico de drogas marítimo.

Desde primeras horas de la mañana de ayer, un autobús de la Guardia Civil permaneció estacionado frente a la sede judicial de Cambados. En su interior estaban las 12 personas que continuaban detenidas desde que el miércoles se desató la operación Munari, a cargo del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidrogas (EDOA) y el Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) de la Guardia Civil, con el apoyo del Servicio de Vigilancia Aduanera y del Grupo de Respuesta Especial al Crimen Organizado (Greco) del Cuerpo Nacional de Policía en Galicia. Los primeros implicados pudieron hablar con sus abogados hacia las diez y cuarto de la mañana, para ser conducidos a continuación ante la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de la localidad arousana, que instruye el caso, y el fiscal antidroga de Pontevedra. Se iniciaba así una maratoniana jornada que proseguía hasta última hora de la noche, 11 horas después de haber arrancado.

Cinco de los individuos que ayer prestaban declaración fueron arrestados en Galicia. Entre ellos se encuentra Pablo Vázquez, el supuesto líder de la organización que fabricaba narcolanchas a través de un estudiado entramado centralizado en O Salnés, con naves en Meaño, Meis y Cambados, y ramificaciones en Salamanca y el norte de Portugal y que es uno de los que ayer ingresó en prisión. Se trata de un hombre de unos 34 años y con residencia en Arousa. Representaría a una nueva generación del negocio en la ría. Un especialista en el trabajo con la fibra de vidrio, el principal material con el que se construyen los superbólidos que cruzan las aguas del Atlántico y del Mediterráneo cargados de sustancias psicotrópicas.

En la misma operación cayeron Ramón Bugallo Martínez, conocido como Mon, un primo de Sito Miñanco que fue apresado en su domicilio de la calle de Os Olmos, en Cambados, y su hijo. Fueron de los primeros en descender del autocar verde y blanco de la Guardia Civil.

Los 27 registros que había autorizado el juzgado de Cambados en diferentes puntos de Galicia, Castilla y León, Madrid, Cataluña y Portugal, en este caso en colaboración con los magistrados de la Agencia de la Unión Europea para la Cooperación Judicial, condujeron, en realidad, a 21 detenciones. Nueve de los arrestados fueron puestos en libertad horas después al limitarse su papel al de meros operarios a sueldo, aunque mantienen su condición de investigados.

Un ciudadano marroquí

En Madrid se encuentra otra de las claves de la operación. Allí cayeron tres hombres de nacionalidad marroquí a quienes se atribuye una estructura propia dedicada al narcotráfico. En concreto, al movimiento de hachís. La investigación apunta a que los fabricantes de narcolanchas de Arousa, capaces de colocar sus embarcaciones en las zonas calientes del litoral peninsular, encontraban a sus principales clientes en Marruecos. Uno de ellos fue trasladado también a Cambados.

El juzgado había levantado el secreto del sumario, por lo que los abogados pudieron estudiar las diligencias a primera hora.