Llegan las judías, los espárragos y las frutas de hueso

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

CAMBADOS

Maruxa Alfonso

En el mercado de Cambados se podían encontrar ya las judías cultivadas por los agricultores de la zona

28 abr 2021 . Actualizado a las 15:29 h.

La lista de frutas y verduras disponibles en los mercados se va renovando a medida que la primavera avanza. Sigue habiendo peras, manzanas y plátanos, pero ahora estos dan paso a las frutas de hueso. Peladillos, melocotones y albaricoques tiñen de colorido los puestos. Es también tiempo de espárragos, verdes y blancos. Y, sobre todo, de judías. Porque empezamos a encontrarnos a la venta las que cultivan los agricultores gallegos, más tiernas y dulces. 

Las judías

Las primeras en llegar. Aunque este es un cultivo que solemos encontrar todo el año en los mercados, ahora es el mejor momento para consumirlo. Porque esta es la época en la que se recogen en Galicia, cuando más tiernas y dulces están. Al mercado de Cambados, por ejemplo, han llegado ya las primeras de la temporada, las que cultivan los agricultores de la zona con mucho mimo. Las judías constituyen el acompañamiento perfecto en miles de platos, pero también son una alternativa perfecta para degustar en solitario, con un simple chorro del mejor aceite.

Espárragos

Blancos y verdes. Es también el tiempo de los espárragos. Tanto de los trigueros, que se pueden degustar a la plancha o salteados, como de los blancos, que son deliciosos recién cocidos acompañados de una mahonesa. Es cierto que este no es un cultivo típico de la comunidad, pero cada vez está más presente en la cesta de la compra, incluso los blancos que suelen llegar al mercado amparados por la IGP Espárragos de Navarra.

Frutas de hueso

Una gran variedad. También en las frutas se puede apreciar un cambio en la oferta de los mercados. Llegan las de hueso, los melocotones, albaricoques, peladillos y nísperos que tiñen de rojos y naranjas los puestos y que, en algunos casos, se cotizan muy al alza. Porque aunque hay algunos cuyo precio ronda los dos euros al kilo, hay otros que superan los cinco euros. Y aunque todavía no están en su mejor momento, que llegará más avanzada la primavera, la verdad es que ya hay ganas de degustarlos.