Rafael Palacios se hizo con el galardón a la mejor bodega y a mejor vino revelación
28 oct 2022 . Actualizado a las 19:32 h.Por ser «unha iniciativa independente, que busca e consigue achegar a cultura do viño a tódolos públicos, dando a coñecer na nosa terra a pequenos grandes viticultores de proxección internacional». Estos son, en palabras del presidente del Instituto Galego do Viño (Ingavi), Xoán Cannas, los motivos por los que la feria Castes logró el Mágnum a la mejor iniciativa enoturística de Galicia, imponiéndose a la concejalía de Enoturismo del Concello de Cambados, al Festival Ribeira Sacra, al Museo do Viño de Galicia y al Museo da Ciencia do Viño de Galicia. Esta feria independiente es, precisamente, la responsable de que el Ingavi eligiera Vilagarcía para entregar, un año más, sus prestigiosos premios Mágnum. Galardones en los que el enólogo Rafael Palacios resultó doblemente premiado, como mejor bodega y como autor del mejor vino revelación.
El de Castes fue el único galardón que se vino para tierras arousanas. En el resto de categorías, fue la provincia de Ourense la gran beneficiada. Allí se elabora, concretamente en la denominación de origen O Ribeiro, el que está considerado el mejor vino gallego del año, el Xanledo 16. El jurado destacó de esta bodega que su propietario «conseguíu co seu traballo diario crecer en finura, elegancia e singularidade, sendo cada vez máis un espello do espírito da súa zona». En cuanto al mejor vino revelación, el galardón fue para Sorte Antiga 2016, elaborado por Rafael Palacios. Es este un Valdeorras que constituye «unha fantástica interpretación dunha elaboración tradicional», explicó el jurado.
Pero no es este el único galardón que se llevó Palacios. Su bodega obtuvo también el Mágnum a la mejor de Galicia por ser «un referente mundial. Desenvolve en Valdeorras un traballo indiscutible. Destila profesionalidade e coñecemento profundo do eido», valoró el jurado.
Otros de los profesionales que tienen su premio Mágnum son los sumilleres que, en esta ocasión además, contaron con una categoría revelación para reconocer la labor de los que están empezando. El nuevo galardón fue para Marta Costas Castro, sumiller de A Tafona, una profesional que «contaxia a sala e o servizo da súa particular elegancia». El premio al mejor sumiller gallego del año fue para Xurxo Rivas, copropietario y sumiller en la taberna O Secreto, de A Coruña. «Casi dúas décadas facendo do Secreto un referente do viño a nivel nacional e un punto de peregrinación obrigatorio para os amantes do bo viño», destacó el jurado de su trabajo. Hubo, además, un premio para el restaurante que mejor trata el vino gallego fuera de Galicia, que fue para El Capricho de León porque «a súa carta sitúa os viños galegos á altura de grandes añadas e viños internacionais».
El último de los galardones entregados, el Mágnum Honorífico, fue para Fernando Filgueira, sumiller jubilado del Bagos de Pontevedra. «Cando todo o mundo traballaba coas mesmas grandes adegas, Filgueira converteu os seus establecementos en lugares onde podías probar cousas diferentes tanto de Galicia coma de fóra», explicó Miguel Anxo Besada, sumiller y encargado de entregar el galardón.
Una veintena de equipos de cata y 68 bodegas de toda Europa, en la feria vilagarciana
Esta mañana abrirá sus puertas la tercera edición de la Feira do Viño Independiente, Castes, una cita que convertirá a la capital arousana en lugar de referencia para el sector. Por su concepción y por su formato, este certamen se aleja de las tradicionales ferias que se celebran en el resto de la comunidad. Y su apuesta parece acertada pues en la edición de este año se darán cita un total de 68 bodegas. La mayoría son gallegas, pero también hay del resto de España, de Portugal, Francia e Italia. Su principal característica en común es que responden al perfil de vinos de autor.
La celebración dará comienzo a primera hora de la mañana, con el campeonato de cata por equipos para profesionales. Un total de 22 equipos llegados desde diferentes puntos de España competirán por ser el mejor. Cada uno de ellos consta de cuatro componentes y deberán adivinar en una cata a ciegas la variedad de uva, la procedencia del vino, la bodega de la que se trata y el año de cosecha de diferentes vinos gallegos, nacionales e internacionales.
Alrededor de las doce y media de la mañana dará comienzo la feria propiamente dicha. Será en la plaza de abastos de la ciudad. Esta está concebida como un lugar de encuentro directo entre amantes del vino. Viticultores, bodegueros, profesionales y particulares tendrán la oportunidad de conocer y compartir proyectos y experiencias. Y, por supuesto, también de probar los vinos de algunas de las 68 bodegas que participan.