Los plazos para reabrir la piscina de Cambados siguen dilatándose

Bea Costa
bea costa CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

MARTINA MISER

El Concello calcula que este mes se ejecutarán las obras de fontanería pendientes y se instalará el mobiliario

11 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La piscina municipal de Cambados sigue cerrada y tampoco dará tiempo a que pueda abrir en julio. Está pendiente la ejecución de unas obras de fontanería para reparar los problemas que aparecieron a última hora en el sistema de filtrado del agua, la reparación de la sauna y la instalación del equipamiento de los nuevos vestuarios. El Concello firmó esta misma semana el contrato de obra con un plazo de ejecución de un mes y espera resolver en cuestión de días el contrato para la compra del mobiliario, de manera que en el mes de agosto pueda estar todo a punto para que la piscina retome su actividad.

En todo caso, la experiencia indica que los plazos nunca se cumplen cuando se habla de estas instalaciones de forma que sería ya un éxito que pudieran abrir en septiembre, coincidiendo con el nuevo curso.

La piscina de O Pombal lleva año y medio cerrada y el presupuesto de la obra no para de crecer. De los 900.000 euros que iba a costar la nueva cubierta se ha pasado a millón y medio de euros para hacer frente a la construcción de unos vestuarios nuevos, la renovación del sistema eléctricos, la reparación de otras averías y la compra del mobiliario. Las últimas facturas que pagará el Concello suman 70.000 euros, que saldrán de las arcas locales, según informa la alcaldesa, Fátima Abal.

Ayer, técnicos de la Diputación de Pontevedra visitaron las instalaciones para supervisar la marcha de un proyecto que realizó y financió el organismo provincial. La comitiva de autoridades visitó el pasado febrero las flamantes instalaciones y anunciaban que estarían operativas en abril. La piscina ni siquiera llegó a tiempo para las elecciones. Con suerte, los cambadeses y demás usuarios de la comarca podrán nadar en ella a la vuelta del verano.