Adiós a las aulas en descapotable

Bea Costa
bea costa CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

MONICA IRAGO

Pili, Maricarmen, Lula y Meli recibieron el cariño de sus compañeros y hasta fueron recibidas por la alcaldesa

28 jun 2019 . Actualizado a las 07:49 h.

Seguramente sospechaban que sus compañeros les estaban preparando algo especial con motivo de su retirada, lo que no podían imaginar es que las iban a recoger en el descapotable de Pili a la puerta del colegio y que las llevarían de paseo por Cambados como si fueran estrellas de cine. De esta forma arrancó la fiesta homenaje que el colegio San Tomé le brindó ayer a sus cuatro profesoras más veteranas, que se prejubilan y se despiden de las aulas definitivamente.

Pili Prego, Maricarmen Nogueira, Amelia Ares (Meli) y Obdulia Blanco (Lula) llevan años impartiendo clases en el San Tomé, y antes ya habían pasado por otros colegios de Cambados. Ahora llega el momento de descansar y lo habitual en estos casos es celebrarlo con una comida, discursos y regalos. Ayer tampoco faltaron, por supuesto, pero hubo una sorpresa que llegó sobre ruedas. A eso de la una de la tarde, un flamante coche negro descapotable tuneado con globos las recogió en el centro y las llevó a la plaza del Concello, donde las esperaba la alcaldesa, Fátima Abal, para sumarse al homenaje entregándoles unas flores. El chófer volvió a recogerlas y les dio una vuelta por el pueblo mientras sus compañeros se dirigían a la bodega Granbazán para ultimar los preparativos de una fiesta que se alargó toda la tarde.

Con anterioridad, las profesoras ya recibieran el homenaje de sus alumnos, que les dedicaron frases como «sempre te recordaremos con cariño», «desexamos que goces dunha xubilación moi ben merecida» y un «botaremos de menos á profe Pili, pola súa alegría e sentido do humor».

Con estos testimonios cerraron una serie de entrevistas que los propios niños realizaron a sus maestras a propósito de su marcha. Y así podemos conocer un poco más sobre ellas. Por ejemplo, que Pili quería ser astronauta, Maricarmen soñaba con ser piloto de ralis y que a Meli le hacía ilusión ser locutora de televisión; y que cuando Lula se estrenó como maestra en Tui sus compañeros la confundían con una alumna y que las lenguas son sus asignaturas favoritas.

Como buenos periodistas, los chicos no dejaron pasar la ocasión de preguntarles por el capítulo de las anécdotas, y las hay graciosas, como la que vivió Maricarmen en Outeiro de Vea, donde en plena clase de Educación Física tuvieron que espantar a unos cerdos que se habían colado en el recinto. Lo de Pili Prego fue algo más truculento porque, según cuenta, un niño que se había ausentado para ir al baño apareció en clase con un trozo de cristal de un espejo clavado en la espalda.

Son las pequeñas historias que conforman cuatro vidas dedicadas a la docencia. Ahora llega el momento de disfrutar, dicen las protagonistas, con la lectura, el deporte, la naturaleza, el cine, la jardinería y viajando.