En fosforito, en las rotondas y en inglés para hacerse ver

Bea Costa
Bea Costa CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

MARTINA MISER

La villa del albariño ya estaba en el mapa, pero nunca tanto como desde que Abal se puso manos a la obra

20 mar 2019 . Actualizado a las 10:39 h.

Fue uno de sus empeños este mandato: tener un Cambados más visible y más seguro, y por señalización no va a quedar. Desde sus competencias en materia de enoturismo y ordenación del tráfico, el concejal José Ramón Abal ha ampliado de forma notable el número de señales dentro y fuera del casco urbano. Su última propuesta son unas señales en color fosforito y rotuladas en inglés, como nunca se habían visto en el pueblo. Es el formato empleado para informar de la existencia de aparcamientos libres y gratuitos en las inmediaciones del casco histórico de Fefiñáns, pensando especialmente en los turistas.

Las peatonalizaciones que se han implantado de forma progresiva en la zona han mermado el número de plazas de aparcamiento y el Concello, primero con Luis Aragunde como alcalde y ahora con el cuatripartito, se ha hecho, mediante un sistema de arrendamiento, con dos parcelas estratégicamente situadas en la avenida do Salnés, a pocos metros de la plaza de Fefiñáns, para destinarlas a aparcamiento. El caso es que muchos turistas, y algunos cambadeses también, desconocen la existencia de estos espacios de uso gratuito, de modo que urgía señalizarlos, como así se hizo, en las avenidas de Vilagarcía y de Vilariño. Una de las que se colocó en Corvillón ya no está debido al accidente de tráfico ocurrido este domingo.

Estas señales se complementan con otras de color violeta que indican la situación de los monumentos y con dos paneles informativos que se acaban de instalar en San Tomé y en Fefiñáns explicando los valores patrimoniales de ambos enclaves. Pero, sin duda, el cartel por excelencia es el que recibe a los conductores en la rotonda de Vilariño desde la primavera del 2017, cuando Cambados logró la distinción de Cidade Europea do Viño. Fue un año especial y había que hacerse ver, de modo que Abal realizó su particular cruzada por que el nombre de Cambados asomara en cuantas más carreteras, mejor. En la autopista no pudo ser, pero sí en la Autovía do Salnés, donde pudo colocar dos indicadores rotulados como «Vila de Cambados», toda vez que no le permitieron usar «Capital do Albariño».

Colocó otras muchas señales en la red viaria del término municipal relacionadas con los cambios introducidos en la ordenación del tráfico, caso de la prohibición del paso del tráfico pesado por la avenida de Vilariño y por sendas carreteras provinciales de Corvillón y Oubiña.

¿Cuánto ha costado este despliegue? El edil hace un cálculo de urgencia y le salen unos 35.000 euros, financiados con fondos municipales y de la Diputación de Pontevedra en su mayor parte. Valgan dos ejemplos: solo el cartel de la Cidade do Viño supuso un desembolso de nueve mil euros y las señales de los párkings públicos, tres mil. El concejal da por bien empleado este dinero. «Cambados non estaba ben sinalizado. Non foi un capricho, era unha demanda dos veciños», afirma.