Peatonalización en Fefiñáns sí, pero no sin servicios

Bea Costa
bea costa CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

MARTINA MISER

Comerciantes y hosteleros están en pie de guerra contra el Concello. Se sienten engañados porque las mejoras prometidas para sus negocios no llegan

08 ene 2019 . Actualizado a las 11:18 h.

Los empresarios de la zona de Fefiñáns (Cambados) están muy molestos con el concejal delegado de Tráfico, José Ramón Abal, hasta el punto de que el sábado por la tarde muchos de ellos cerraron la puerta y colgaron carteles críticos con el Concello. Y no será su última protesta, a no ser que se atiendan sus demandas, más pronto que tarde. El motivo no es tanto la peatonalización como que no se hayan adoptado las medidas prometidas para mejorar los servicios en las zonas afectadas. Es decir, facilitar a los empresarios una tarjeta que les permita acceder a sus negocios para labores de carga y descarga, colocar señales indicando la existencia de dos aparcamientos públicos y gratuitos en la zona de Fefiñáns, la mejora de la limpieza y colocación de papeleras y la programación de una oferta de actividades que sirva de reclamo para que la gente acuda a Fefiñáns, también, a hacer sus compras.

Con la excepción de la cabalgata, que este año concluyó en la plaza, nada se ha hecho respecto a las demás cuestiones, y los empresarios se sienten engañados. El pasado día 2 habían sido convocados por Abal a una reunión para hablar de todas estas cuestiones, pero esa reunión se suspendió a última hora, lo cual hizo colmar el vaso de su paciencia.

Los cambadeses que acompañaban a los Reyes Magos el sábado pudieron comprobarlo a través de carteles colgados en los escaparates en los que se leía: «Concello cumpre o compromiso cos negocios». Porque, insisten, su voz debe ser oída a la hora de tomar una decisión como la de cortar al tráfico la plaza y las calles Real y Príncipe.

65 empleos

«El cierre durante el verano ni se discute, a mí incluso me parece bien, pero lo que no puede ser es que se nos digan que el cierre era hasta finales de septiembre y en diciembre sigamos igual. Se nos está echando a la gente encima y lo que estamos pidiendo es que se nos tenga en cuenta». Lo dice Bruno Somoza, un empresario que tiene dos tiendas en la calle Real y que, afirma, ha visto mermadas sus ventas hasta el punto de emplear a menos personal del habitual para la campaña de Navidad. «Contribuimos mucho, pagamos unos alquileres muy altos y generamos empleo, en esta zona hay 65 personas trabajando», argumenta, y echa de menos una mayor implicación por parte del Concello a la hora de promover la hostelería y el comercio en Fefiñáns.

«En Vilagarcía se sabe donde puedes aparcar si vas a comprar y en Vilanova, el Concello puso unos juegos con casitas para los niños en el centro del pueblo que sirvieron para atraer a mucha gente. En Cambados no se hace nada por el comercio y cuando protestas, te amenazan», indica el empresario en alusión al concejal Xurxo Charlín, que acaba de hacer una llamada al orden a los hosteleros por el tema de las terrazas.

El colectivo, que conforman catorce empresarios, pide soluciones. Según informó ayer José Ramón Abal, estas llegarán. «Estamos convencidos de que acadaremos solucións para todos, van ter a nosa colaboración». Si se suspendió la última reunión, explica, fue porque el policía local que está encomendado a este tipo de cuestiones está de vacaciones, «pero en canto se incorpore reunirémonos con eles e procuraremos resolver todos os problemas».

José Ramón Abal reconoce que la peatonalización requiere la adopción de medidas excepcionales, como la de autorizar el paso en coche a los empresarios y a sus clientes, caso del hotel que hay en la calle Real, y que algunas medidas se están retrasando más de lo previsto, «pero faranse». Se refiere a la colocación en las avenidas de Vilariño y de Vilagarcía de las señales indicadoras de los aparcamientos públicos y al pavimentado de uno de los párkings, el más reciente, que sigue con piso en tierra. «A ver se o temos listo para febreiro», abundó.

A lo que no pone fecha es al calendario de la peatonalización. Lo que iba a ser una medida solo para el verano se ha alargado durante seis meses, y se desconoce por cuanto tiempo más. Depende, dice el edil, de los trabajos de soterramiento del cableado de Telefónica y de las obras de reparación del pavimento de la plaza. La incógnita sigue en el aire.