El Concello de Cambados vuelve a darle oxígeno a Esperanza

b. c. CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

MONICA IRAGO

A falta de una línea de financiación estable por parte de la Administración, la asociación sobrevive con ayudas públicas y con donativos particulares

21 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Otra vez es el Concello de Cambados el que salva de su perpetua agonía económica a la asociación de ayuda a niños con discapacidad psíquica, Esperanza Salnés. A falta de una línea de financiación estable por parte de la Administración, la asociación sobrevive con ayudas públicas y con donativos particulares, que siempre se quedan justos para cubrir los gastos que generan los servicios que se dispensan a veinte menores que reciben atención en su sede de Cambados.

A los 15.000 euros de la Xunta y los 10.000 euros de la Diputación -que están comprometidos, pero sin cobrar- se suman 16.000 euros que aporta el Concello cambadés, que se convierte así en el principal benefactor de Esperanza. «En tres anos duplicamos as aportacións. Dos 7.500 euros que recibían na etapa anterior pasamos a 16.000 euros, e debemos seguir incrementando esa axuda. Mentres eu sexa concelleiro de Servizos Sociais, Esperanza non desaparecerá», sentenció el concejal Tino Cordal, que ayer firmó el convenio anual de colaboración junto al gerente de la asociación, Augusto Chaves.

Este agradeció el apoyo recibido y el compromiso del Concello con Esperanza Salnés y demandó, como hiciera minutos antes Tino Cordal, una mayor implicación económica por parte de la Xunta y de la Diputación de Pontevedra. «Cambados ten a fortuna de ter unha concellería de Servizos Sociais específica, estase facendo moi boa labor. É xente de palabra», señaló Chaves ante Cordal y el concejal de Economía, Xurxo Charlín. El gerente informó de que la subvención municipal les da oxígeno hasta enero y, a partir de ahí, con la ayuda de la Diputación y el nuevo convenio con el Concello correspondiente al 2019, Esperanza volverá a superar otro curso y llegará al próximo verano. «Ogallá sigamos nesta incertidume outros vinte e un anos máis», señaló Chaves.