La Festa do Albariño arranca con un alegato a favor de las mujeres

Bea Costa
bea costa CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

MARTINA MISER

La pregonera, Merchi Álvarez, y las autoridades se alían contra la violencia machista

02 ago 2018 . Actualizado a las 11:37 h.

¡Viva o albariño, vivan as mulleres, querémolas vivas!. Con este desiderátum concluyó ayer Merchi Álvarez el pregón de la Festa do Albariño. Esta cambadesa que se hizo popular, a su pesar, por su lucha contra la atrofia muscular espinal (AME), se felicitó por ser la primera mujer en abrir las fiestas desde el balcón de la casa consistorial y aprovechó esta plataforma para reivindicar el papel de la mujer. Rosalía de Castro fue la referencia literaria elegida para la ocasión y en femenino quiso también acabar su discurso, con una alusión directa a la violencia machista.

De este problema se siguió hablando minutos después, ya en el Paseo da Calzada, en la primera parada que hizo la comitiva oficial. A la entrada del recinto de se instaló un punto informativo sobre el problema de la violencia machista, que actuará, también, como un punto de denuncia y atención a las posibles víctimas de acoso sexual. Alrededor de cuarenta voluntarias colaboran con esta iniciativa, voluntarias que han recibido un cursillo para tal fin y que lucen un brazalete de color morado para identificarse como agentes de este servicio pionero. También se presentaron aspirantes hombres, pero la organización pensó que para atender este tipo de consultas, mejor hacerlo entre mujeres.

Tanto la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, como la alcaldesa de Cambados, Fátima Abal, aludieron a la importancia del punto morado a la hora de combatir las conductas agresivas hacia el género femenino y no dudaron en ponerse el brazalete. La conselleira do Medio Rural, Ángeles Vázquez, y la subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba, también se sumaron a la causa, y es que ayer, más que nunca, las mujeres coparon los primeros planos de la comitiva oficial. Juan Gil, el presidente del Consello Regulador Rías Baixas, fue la única autoridad varón en el corte de la cinta inaugural.

Ellas juegan un papel relevante en la edición de este año pero, sin duda, el protagonista indiscutible vuelve a ser el albariño, un vino que, en palabras de Carmela Silva, «é o mellor branco do mundo e que fala do que somos nós, seguro que no paraíso teñen botellas de albariño», apostilló. La conselleira abundó en esta línea argumental, aludiendo a los Rías Baixas como un gran embajador de Galicia y destacando el esfuerzo que hacen viticultores, bodegas y administración por situar este producto en lo más alto. Juan Gil, por su parte, recordó que esta denominación de origen conquista cada vez más mercados.