Tras dos meses de arduas gestiones administrativas el club se ha encontrado con que el jugador tiene aún su tobillo derecho hinchado, y teme que sufra una lesión ósea
14 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La odisea padecida por el presidente y el director deportivo del Xuven, Toño Lema y Manu Felpeto, para conseguir traer a Bernard Morena a Cambados desde Costa de Marfil puede acabar en tragedia. La mezcla de alegría y alivio al ver aterrizar en A Coruña al pívot africano en la mañana del jueves se tornó en un estupefacción y cabreo en las oficinas de O Pombal al observar cómo Morena llegaba al pabellón del que debería ser su nuevo equipo cojeando y con su tobillo derecho hinchado. En el Xuven sabían que el baloncestista se había lesionado en la antesala del Afrobásket, pero, explica Felpeto, los informes médicos enviados hace 1 mes por la Federación de Baloncesto de Costa de Marfil reducían el problema a un esguince leve. El preparador físico, el fisioterapeuta y el podólogo del equipo amarillo coincidieron en que el trauma era mayor, sin descartar una lesión ósea. De ahí que el club acelerase el reconocimiento médico de Morena a ayer. Por temor a un lesión de alcance que el Xuven no está dispuesto a asumir, acogiéndose en su caso a la cláusula del contrato del jugador por la que el club puede cortarlo sin compensación si lo manda a reconocimiento médico en las 72 horas siguientes a su llegada al equipo y no lo supera.
Toño Lema consiguió sin cita que el traumatólogo del Hospital Quirón Miguel Domínguez de Pontevedra viese a Morena en la mañana de ayer, y que se le practicase una resonancia a última hora de la tarde. Pero, cuenta el presidente del Xuven, hasta el lunes no tendrán los resultados. Con ellos el traumatólogo dictaminará el futuro de Morena en Cambados.
Los de Chiqui Barros buscan deshacer su empate sin victorias con el Canoe
El entrenador del Xuven Cambados, Chiqui Barros, pretendió mantener ayer al equipo ajeno al culebrón Bernard Morena. Empezando por él mismo. «Morena chegou o xoves, e xa está. Vino, saudeino, e está en mans dos médicos. Se o luns me din que está á miña disposición, estarei moi contento, se non pasa a revisión médica, non hai máis que dicir», declaraba el técnico ferrolano poco después de la conclusión del último entrenamiento del conjunto arousano antes de encarar su tercer partido de Liga.
A las nueve de la mañana tenía prevista su salida hoy el Xuven desde O Pombal hacia Madrid, con cita desde las ocho de la tarde con el Real Canoe. Un histórico del baloncesto español, como recordaba en la víspera del choque el propio Chiqui Barros, que tras un pasado en la extinta 1ª. B y la EBA, cuando estas eran la antesala de la máxima categoría del deporte de la canasta en España, ha vuelto por fin al radar del baloncesto profesional con su ascenso la pasada primavera a la LEB Plata.
El Real Canoe es uno de los cuatro equipos con los que el Xuven comparte balance tras las dos primeras jornadas de Liga, con cero victorias y dos derrotas. Tres son los grandes puntos fuertes del conjunto madrileño, destaca Chiqui Barros: «A dirección dos seus bases», con el excompañero de Juanchi en Zornotza, Dani de la Rúa, como referente principal, «a súa fortaleza no rebote», sobresaliendo en el discurso del ferrolano los nombres de Tyson Pérez y Walter Cabral; y «o físico da súa liña exterior».
Frente a un equipo que, como el suyo propio, ve creciendo a lo largo de la Liga, Chiqui Barros afirma que «vimos da nosa mellor semana de adestramentos ata hoxe, pero claro, iso debemos levalo agora á cancha». Con Chufi de nuevo como munición en la recámara en espera de Morena, o el pívot que tercie el club.