Cambados reordenará la avenida de A Coruña para evitar que los peatones caminen por la calzada

Bea Costa
bea costa CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

MONICA IRAGO

Se moverán aparcamientos de sitio y se colocarán nuevas señales

18 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La avenida de A Coruña constituye un punto negro en la seguridad vial de Cambados. Su proximidad a la plaza de Fefiñáns la convierte en una calle muy transitada y se da la circunstancia de que en un tramo los peatones tienen que caminar por la carretera por falta de aceras. Hace años que el Concello trató de resolver el problema negociando el retranqueo del muro que se adentra en la calzada. El propietario, José Vilas, se mostró dispuesto a ceder los terrenos, pero Patrimonio impide mover las piedras que cierran este noble jardín.

Ante la imposibilidad de construir una acera, al Concello va a optar por reforzar la señalización y reordenar los aparcamientos en la zona. Gracias a una ayuda de 40.000 euros del Plan Concellos de la Diputación de Pontevedra se van a acometer próximamente obras de humanización en esta calle, que incluyen la instalación de pasos de peatones elevados y de nuevas señales.

Cambiar de lado los autobuses

Cruzar será más seguro y lo que se va a intentar es que los peatones que se dirigen a la plaza de Fefiñáns elijan la margen norte de la calle -donde sí hay aceras- en vez del tramo sur, de manera que, al aproximarse a la iglesia de San Benito, utilicen el paso de peatones para cruzar, sin necesidad de sortear a los coches, como ocurre ahora. Para canalizar el flujo de peatones hacia el cruce debidamente señalizado, está previsto cambiar de lado los aparcamientos de los autobuses, lo que abocará a los viajeros a caminar por donde sí hay aceras, según explica el concejal de Obras, José Ramón Abal.

El parque biosaludable de Castrelo, parado, y el refugio, más seguro

La construcción de un parque biosaludable en Castrelo se retrasa. Las obras empezaron a comienzos de junio con la perspectiva de que estuvieran finalizadas en pocas semanas, pero los planes se han torcido y el proyecto está parado. El motivo es que Patrimonio solicitó al Concello que realizara unas catas en la parcela en cuestión con el fin de comprobar si hay restos arqueológicos que conservar debido a la cercanía de un castro. A mediados de junio hubo que parar las máquinas y contratar las excavaciones, y estas catas ya arrojan un resultado: no hay restos que conservar y, por tanto, las obras pueden continuar, según informa el concejal de Obras, José Ramón Abal.

A día de ayer, el Concello estaba a la espera de que Patrimonio firmase la autorización oportuna para reanudar los trabajos que permitirán habilitar al lado del parque infantil, otro parque destinado a los adultos, dotado de aparatos para hacer ejercicio, y con un merendero y zona verde. Abal prevé que las obras comiencen en cuestión de días y que en septiembre el nuevo parque esté disponible para los vecinos, pero al PP ya le tarda demasiado. Su portavoz, Luis Aragunde, lamentó ayer el retraso que acumula esta actuación.

Abal sí estaba ayer en disposición de anunciar el inicio de otra obra, en este caso en el refugio de animales de Cambados, donde se empezaron a consolidar los taludes de la zona perimetral con el fin de evitar desprendimientos sobre el recinto donde están los animales. La obra tiene un presupuesto de 7.200 euros y se financia con fondos de la Diputación de Pontevedra.