Esta fórmula permite a los concellos hacer obras y prestar servicios de forma barata, al tiempo que generan empleo
09 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Es la lotería que cada año reparte la Consellería de Economía, Emprego e Industria entre los concellos. Numerosos ayuntamientos concurren a la convocatoria de los obradoiros de emprego, pero solo algunos resultan elegidos. La comarca de O Salnés ha salido bien parada en esta última remesa, con la concesión de cuatro obradoiros, y se espera un quinto de agricultura ecológica para Vilanova, que empezaría en noviembre. Los concellos de Vilagarcía y de Cambados tienen ya en marcha sus nuevos talleres al igual que ocurre con los dos de la Mancomunidade do Salnés, estos de ámbito comarcal.
Esta fórmula resulta muy atractiva para la administración local pues le permite disponer de mano de obra barata al tiempo que contribuye a rebajar las cifras de desempleo en los respectivos municipios. En esta última hornada, 95 personas que estaban en el paro encontraron la oportunidad de firmar un contrato de aprendizaje por un período de seis meses, que les permitirá ingresar una nómina de 764 euros brutos al mes. En este tiempo los alumnos aprenden un oficio y obtienen una formación que los habilita para insertarse en el mercado laboral y, de paso que realizan las clases prácticas, acometen obras y servicios para los concellos. La mayoría de los obradorios se destinan a obras y jardines. Es el caso de Vilagarcía y Cambados donde se desarrollan módulos de cantería, carpintería y jardinería y en la mancomunidad hay otro de carpintería y colocación de piedra natural que está orientado a la rehabilitación de los antiguos molinos de río.
Pero también hay obradoiros dirigidos al sector servicios. El de hostelería es uno de los más veteranos -va por su octava edición- y de los que consigue índice de contratos al término del período formativo. En esta edición formará a diez camareros y otros diez cocineros y los menús que salgan de sus clases servirán para realizar actividades de promoción de la gastronomía de la zona y para proveer al comedor social de Cáritas. En Vilagarcía también apostaron por el sector servicios. Dentro del plan Labor@Xoven, ocho chicos de entre 18 y 25 años se preparan como auxiliares para la organización de actividades deportivas y otros siete, para monitores de tiempo libre, que en sus clases prácticas colaborarán con las actividades municipales de juventud, cultura y deportes.
Hostelería y restauración de molinos. La mancomunidad hace doblete. En septiembre arrancó el clásico Obradoiro de Hostalería, aunque con novedades porque este año cambió su sede de O Grove a Sanxenxo, para formar a camareros y cocineros. También empezó un taller que permitirá restaurar ocho molinos de río distribuidos por Meaño, Vilanova y Sanxenxo. Cada uno de ellos tiene veinte alumnos.
Carpintería y jardinería. El obradoiro Castro Alobre actuará casi en exclusiva en este parque, donde los alumnos colaborarán con los servicios municipales a la hora de reponer e instalar mobiliario urbano y ajardinar y mantener este espacio verde. A mayores, Vilagarcía dispone de otros dos obradoiros para formar a monitores de tiempo libre y auxiliares de instalaciones deportivas. fotos martina miser
Regeneración del centro urbano. Los veinte alumnos de carpintería y jardinería trabajarán en la urbanización de la calle Celso Emilio Ferreiro, la mejora de las zonas recreativas anexas a los centros culturales de las parroquias y de los jardines urbanos así como en la dotación de nuevo mobiliario urbano, tal como bancos de piedra que señalizarán la ruta Ramón Cabanillas.