Los ojos que nos enseñan la belleza bajo las aguas

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

A ILLA DE AROUSA

MARTINA MISER

Paco Ventoso y Ángel Manuel Rey consiguieron la medalla de bronce en el Campeonato de España que se celebró en Murcia

10 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Iban a Palos para ayudar a la selección gallega a conseguir la primera posición en la clasificación por equipos del Campeonato de España de vídeo submarino y se encontraron con el premio de la medalla de bronce. Ángel Manuel Rey es director del IES Asorey del Cambados y Paco Ventoso, funcionario en el Concello de Vilagarcía. Ambos tienen lo que definen como «un vicio caro», que de vez en cuando les da satisfacciones y que no es otro que grabar pequeños documentales bajo las aguas.

Hace alrededor de veinte años que andan sumergiéndose por las aguas de la comarca. Ángel comenzó con 24 años a tomarse en serio lo de la pesca submarina y el encuentro con Paco llegó a principios de siglo. «No 2003 participamos por primeira vez nun campionato de fotografía submarina», recuerda. Todavía utilizando el carrete. A partir de ahí comenzó una colaboración que cinco años más tarde saltó ya al vídeo submarino.

Forman un equipo muy bien engrasado. Cuando participan en la modalidad de fotografía, Paco es el cámara y Ángel su ayudante, y viceversa en el vídeo. En realidad, ambos conocen bien el oficio. «Os dous sabemos facer de todo», apunta Paco.

El mar es el que decide

No es fácil esta modalidad. Paco y Ángel llevan un guion preparado, pero luego es el mar el que decide, porque sus circunstancias pueden variar. De hecho, eso pasó en el Campeonato de España. «Levamos o guion practicamente elaborado e finalizado. O único que queda pendente é incorporar as imaxes submarinas para integrar na película, e temos que ir adaptándonos. Neste caso tivemos tres días para coñecer os puntos de inmersión, pero o caso é que o día da competición dúas das zonas cambiaron completamente», explica Ángel. El cambio, sin embargo, nos les vino nada mal a los arousanos, que están muy acostumbrados a las características que se encontraron. «As augas aquí son verdes, cunha visibilidade máis reducida», explica Paco. Esto complicaba mucho técnicamente la competición y hubo que esmerarse en el balance de blancos. Sin embargo, el último día, se encontraron con un acuario, en una zona en la que había un cementerio de barcos al lado de una enorme piedra.

No siempre bajan a la misma profundidad. Se trata de encontrar, durante las inmersiones previas, de la flora y la fauna que mejor les puede cuadrar. Hay un límite, que es de treinta metros, pero por razones de seguridad, y quien se lo salte es sancionado.

Siendo todo tan espontáneo, puede suceder que el trabajo en una inmersión se convierte en todo un fiasco. A ellos les pasó en el Campeonato de España. «Cando chegamos á sala de edición tivemos que descartar moitos planos porque non saíron como queríamos.», recuerda Ángel, pero en el segundo día pudieron completar lo que les faltaba.

Su tema versaba sobre la basura en los océanos. Blue heart se llamaba y contaba de boca de la oceanógrafa Sylvia Earle -que este año ha sido galardonada con el premio Príncipe de Asturias a la Concordia- el problema de la contaminación de los plásticos y el exceso de ellos que hay en los mares, además del cambio climático y su incidencia en la cantidad de plancton, y también de las áreas marinas. Los trabajos deben tener un mínimo de dos y un máximo de cinco minutos.

Paco y Ángel aprovechan sobre todo el verano para disfrutar de su vicio. «No inverno pouco saímos», reconoce Ángel. La siguiente cita en el calendario es la Gala de Imaxe Submarina, que el año pasado se celebró, con un gran éxito, en A Illa organizado por su club, el Con Grande de Vilanova de Arousa, y este año será en el norte de Galicia.

Y hablar de esa gala sirve para que podamos desviar el final de la conversación hacia la posibilidad de que las aguas de Arousa acojan un campeonato de España de la modalidad. Ya sucedió en el 2006 y con gran éxito y buen sabor de boca en la federación que, según apuntan ambos, estaría encantada de poder repetir por aquí. «O potencial da imaxe submarina está aquí, na ría de Arousa, agora mesmo», subraya Paco.

El problema, cómo no, es el dinero. Sin embargo, y atendiendo a las cuentas que ambos hacen, no parece que suponga un gran dispendio una cantidad que andaría por los 40.000 euros. «Sería a miña gran ilusión», afirma Paco. Y un gran escaparate turístico, conviene añadir.

Llevan el guion preparado, pero luego son las circunstancias del mar las que deciden

Apostaron por el problema de la proliferación de plásticos como tema de su película