El verano relanza la venta de viviendas en la comarca

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

A ILLA DE AROUSA

MONICA IRAGO

La compra de inmuebles para segunda residencia se revitaliza, y también hay más actividad en el mercado local

26 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras largos años de travesía por el desierto, el sector inmobiliario arousano parece haber llegado este verano a un oasis. El calor ha animado las ventas y en las empresas se palpa cierta satisfacción, aunque sea matizada por las dudas del gato escaldado por la crisis del ladrillo. Ha habido ventas de todo tipo de inmuebles y a todo tipo de clientes, dicen desde detrás del mostrador.

En algunos despachos, como en Alcom Inmobiliaria, han triunfado las ventas a turistas que han decidido anclar sus veranos a la ría de Arousa. «Ahora mismo acabo de salir del notario, de cerrar una venta», nos dice el responsable de este negocio. En este segmento de clientes hay de todo. «Desde quien busca un apartamento, que por otro lado es lo que más sale, hasta quien quiere una vivienda con jardín y piscina», afirma tajante Luis Pedreira. Según su experiencia, Vilagarcía es la localidad favorita para quienes buscan un piso propio en el que veranear. «Aunque todo depende. Tenemos una oficia en Madrid, y allí lo que más tira son los pisos en la zona de Sanxenxo, Portonovo, a Toxa o O Grove».

En la península meca, precisamente, las inmobiliarias también han comenzado a apreciar cierta aceleración de las ventas. «Los bancos ya se han librado de casi todo lo que tenían, y ahora algo hemos empezado a hacer», explican desde el sector. Aseguran que los turistas que llegan hasta ellos no tienen ganas de rascarse demasiado el bolsillo. «Lo quieren bueno, bonito y barato. Pero todo no puede ser», ironiza una agente de ventas. Aún así, señala que «llevábamos tiempo sin vender nada, y ahora algo estamos haciendo».

¿Y qué ocurre en A Illa? Las inmobiliarias de esta localidad, que en los últimos años ha cogido un protagonismo destacado en el verano gallego, han notado también el interés de los turistas por realizar compras. «Mucho interés sí que hay. Muchas preguntas, mucha gente que viene a ver pisos y preguntar... Pero operaciones, pocas». Desde algunas inmobiliarias apuntan a los elevados precios que se piden en este rincón de Arousa, donde los locales no suelen comprar. «La gente de aquí, o tiene terreno para edificar, o tiene casa», sentencian en los despachos.

Gente de aquí

Sin embargo, en Vilagarcía sí se están vendiendo pisos a clientes de aquí. Así lo señalan desde Noval, donde están más que satisfechos con el nuevo cariz que está tomando el mercado inmobiliario. Ya solo falta que empiecen a construirse promociones nuevas para que las cosas vuelvan a coger el tono adecuado. El color de la esperanza.

«Me encanta esto; viviría aquí todo el año porque a Vilagarcía no le falta de nada»

No viene de muy lejos. Mayte Suárez es de A Coruña, y aunque la distancia entre una ciudad y otra no es demasiada, apenas conocía Vilagarcía. «Pero mi hijo se vino a trabajar aquí y, al venir a verlo, me encantó este lugar». Coincidió ese descubrimiento con una etapa en la que esta mujer llevaba un tiempo buscando una zona en la que hacer una inversión inmobiliaria. Y Arousa cobró, súbitamente, ventaja. De hecho, ha acabado comprándose un ático en una de las mejores zonas de Vilagarcía.

«Hay muchos factores que intervinieron en la decisión», relata. Por un lado, lo a gusto que se siente en la ciudad. Y por el otro, los precios. Su luminosa vivienda, enmarcada en el corazón de la capital arousana, es un tesoro al que no podría acceder en A Coruña. «Evidentemente, los precios son determinantes. Tener un ático como el que tengo aquí, en un lugar equiparable en A Coruña... Sería impensable».

Aunque claro, de nada valdrían unos precios ajustados si no fuese este un destino que despertase su atención. «Me encanta esto; viviría aquí todo el año, porque a Vilagarcía no le falta de nada», asegura esta coruñesa. «Hay de todo. Hay comercio, hay Zara, y están todos los bancos», enumera, así que en cuestión de servicios no hay queja. Mayte considera que el suyo no es un caso único. «Esta zona tiene muchísimo potencial. De hecho, me da la impresión de que va a seguir creciendo».

No es de extrañar, pues, que Vilagarcía tenga mucho predicamento entre quienes buscan un lugar para veranear. Y que su centro urbano, cada vez más humano, siga seduciendo a quienes buscan la casa de su vida.