La plataforma convoca una concentración en el hospital en defensa del área sanitaria
A ILLA DE AROUSA
Gonzalo Caballero y los alcaldes socialistas de la comarca apoyan la movilización y reclaman a Feijoo que «abra os ollos»
17 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La caminata del 3 de diciembre marcó un punto de inflexión en las movilizaciones impulsadas por la Plataforma en Defensa da Sanidade Pública en O Salnés. Con ella, la entidad exhibió músculo en torno a la exigencia de que se mantenga el área sanitaria arousana, frenando su disolución en la estructura de Pontevedra. La presidenta de la junta de personal del Hospital do Salnés anunciaba entonces que los actos reivindicativos seguirían adelante. Ella misma apuntó ayer la próxima escala de este particular viaje: una concentración que se desarrollará a las puertas del hospital comarcal el miércoles que viene, a partir de las doce y media de la mañana.
Rosa Casal llama a la sociedad arousana a secundar la protesta, que anticipará la manifestación que el 4 de febrero recorrerá las calles de Santiago. «Seguimos perdendo servizos, acabamos de sufrir picos de gripe cun máximo de 167 atencións nun só día e o señor Feijoo fala de alixeirar e de incrementar o número de camas por habitación, pero para iso é imprescindible una maior dotación de persoal», recordó la presidenta de la junta de personal, que insiste en que de nada sirve ampliar el hospital si no se contrata a los trabajadores necesarios para hacerlo funcionar.
Minutos antes, el órgano de representación laboral se reunía en el complejo médico con el secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, los alcaldes de Vilagarcía, Alberto Varela; Cambados, Fátima Abal; Catoira, Alberto García; y A Illa, Carlos Iglesias: el senador Modesto Pose y el diputado autonómico del PSOE, el vilagarciano Julio Torrado.
El nuevo líder de los socialistas gallegos no solo mostró su respaldo al calendario de movilizaciones; emplazó también al presidente de la Xunta, el popular Alberto Núñez Feijoo, a que «abra os ollos» ante la exigencia de «unha sanidade pública, gratuíta e de calidade» que emana de la sociedad gallega. En opinión de Caballero, lejos de los discursos oficiales complacientes, la gestión del PP en materia sanitaria está dando como resultado «menos camas, persoal menos estable e unhas lista de espera insoportables».
Salieron a relucir viejas demandas, como un nuevo ambulatorio en Vilagarcía o la ambulancia medicalizada para la comarca. Pero, sobre todo, la conservación del área sanitaria propia y la reversión de un proceso que los socialistas consideran absolutamente errado y Caballero resumió como «o afastamento dos servizos para os galegos».