Expertos de España y Francia estudiarán los restos de O Areoso

Bea Costa
Bea Costa A ILLA / LA VOZ

A ILLA DE AROUSA

MARTINA MISER

Se hallaron casi mil fragmentos de cerámica y 200 objetos líticos

14 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Ocho semanas de intervención arqueológica en la mámoa cuatro de O Areoso (A Illa) han dejado un notable inventario: cerca de mil fragmentos de cerámica, doscientos objetos líticos, varios de metal, carbones, huesos y cerca de una centena de muestras de tierra y de contenido del conchero que se localizó al lado de la construcción funeraria.

Para recabar todo este material fue necesario retirar, primero, tres metros de duna que enterraban la tumba neolítica y después, varias capas que se superponían al monumento megalítico, que contenían, a su vez, material arqueológico.

Una vez concluido el trabajo de campo, lo que toca ahora es analizar y catalogar toda la información registrada, labor en la que colaborarán diversos especialistas de las universidades de Santiago, Vigo, León, Burdeos y el Instituto de Ciencias del Patrimonio del CSIC. «O procesado de todos estes materiais seguramente permitirá descubrir máis novidades interesantes deste monumento megalítico», según informan desde la Consellería de Cultura, que promovió la intervención en O Areoso.

Desde la Edad de Bronce

La previsión es que la memoria se presente en diciembre. Entre tanto, lo que ya ha quedado comprobado es que el islote de O Areoso fue ocupado en varios momentos de la Prehistoria. «

Téñense evidencias de que xentes de hai uns dous mil anos se achegaron ata a proximidade da mámoa 4 e deixaron nesta zona restos da súa actividade, con cerámicas semellantes ás que se atopan nos castros e tamén varias pezas metálicas das que destaca unha fíbula (un broche da Idade de Ferro)», según explican desde Cultura. «Tamén sabemos que a comezos da Idade de Bronce, hai uns catro mil anos, e varios centos de anos despois do abandono da mámoa como enterramento, houbo unha importante actividade ao carón desta mámoa, xunto á que se formou un potente cuncheiro, un dos máis antigos documentados en Galicia».

Las excavaciones hicieron posible descubrir la estructura original de la tumba neolítica, donde los arqueólogos destacan el tamaño de la cámara, que está rodeada con una coraza de piedras con una estructura fuerte y bien construida. En el interior de la cámara se hallaron varios cientos de pequeños abalorios planos de piedra, un vaso entero boca arriba y posibles huesos, que ahora habrá que analizar para comprobar si son de origen humano.

Las excavaciones concluyeron el lunes con el tapado parcial de la zona de excavación dejando a la vista la cámara megalítica y la recolocación de la losa que cubre la cámara funeraria.