El bum turístico también se deja notar en las administraciones, que no paran de vender lotería de Navidad. Las terminaciones en 13 y 17 son las más demandadas
27 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Superstición, costumbre, tradición..., cuando las personas viajan y son de las que suelen jugar a la lotería, casi siempre pican fuera de casa y se llevan un décimo del lugar donde estuvieron de vacaciones. Y teniendo en cuenta que O Salnés está recibiendo este verano una avalancha de turistas, se cuentan por miles aquellos que acuden a las administraciones de lotería en busca de la suerte. Prueban con todo: Bonoloto, Primitiva, Quiniela, pero, sin duda, la más buscada es la lotería de Navidad.
A cinco meses para que se celebre el sorteo, algunos números ya están agotados. Las terminaciones más demandadas, con diferencia, son el 13 y el 17. El primero, porque es así desde siempre y porque el año pasado el Gordo acabó en trece y, eso, siempre pesa en las preferencias del público; y el 17, por coincidir con el año en curso. «Estos números no los sirve ni la máquina», según explica el responsable de la administración de San Roque de Vilagarcía, Carlos Cores.
El número de la casa
Allí también tiene mucho éxito el número de la casa, el 86.348, que vende íntegro por ventanilla. Hay clientes de todo el año que se lo llevan pero también lo compran muchos turistas que cuando lo ven tras el cristal no se pueden resistir. Los mil setecientos décimos del 2016 se agotaron en el mes de noviembre, y este año va por el mismo camino. «No hay queja, este verano está siendo bueno, pero ya el del año pasado fue muy bueno, las ventas subieron un cinco por ciento», señala Cores.
Un análisis similar hacen en la administración vecina de la Plaza de Galicia. Allí también constatan que las ventas de lotería de Navidad siguen la pauta del pasado verano, que fue de récord, y el 13 y el 17 vuelven a ser las terminaciones fetiche. «También piden mucho el 69 y el 15», comenta Fernanda, quien ya ha visto pasar a muchos turistas desde julio. «Hay quien lleva un décimo y hay quien lleva para repartir entre la familia», comenta.
Para la familia y para alguien más le dará a la mujer que esta semana se acercó a la administración de A Illa y se llevó 1.200 euros en lotería, a razón de sesenta décimos. En este municipio están notando también el efecto del bum turístico. «A campaña de verán está sendo boa, mellor que a do ano pasado, que xa se vendera moito. O 95 % da lotería que se vende para fóra, véndese no verán, a turistas que veñen de Andalucía, de Madrid..., de todas partes», según explica el lotero Manuel Núñez. La misma tónica se da en Cambados y O Grove, donde el verano se convierte en una buena época de ventas y las administraciones son las primeras en evocar la Navidad, aunque haya treinta grados y el anuncio de la lotería no haya asomado por las pantallas.