Piden un reglamento propio
En el área municipal de Vilagarcía no se podrá estacionar, pero nadie puede impedir al conductor de una autocaravana que aparque en la explanada de Fexdega. «La ley no lo prohíbe. Si un coche puede estar aparcado cuatro días en la calle, nosotros también. Otra cosa es que se aprueben ordenanzas municipales en contra de estas prácticas, por la presión que ejerce el sector de los cámpings, pero, con la ley en la mano, un autocaravanista puede estar dentro de su vehículo el tiempo que quiera, independientemente de la actividad que realice», según explica el presidente de los autocaravanistas gallegos.
Los conflictos entre los usuarios y los concellos por el estacionamiento de autocaravanas en la vía pública son recurrentes y desde la asociación reclaman un reglamento dentro de la Ley de Turismo que sirva para poner fin a la disparidad de criterios que existe en la materia. «Estamos intentando que todo esto se tenga en cuenta. Queremos un reglamento propio, como el que tienen los hoteles y los cámpings», añade Fernández.
Cambados no da el paso, O Grove firma la paz con el colectivo y A Illa cierra O Bao
Vilagarcía le ha tomado la delantera a Cambados. La villa del albariño fue uno de los municipios a los que se dirigió el colectivo de autocaravanistas para solicitar la creación de un área pública donde proveerse de agua potable y vaciar sus aguas negras y grises. La alcaldesa, Fátima Abal, se mostró receptiva a la idea cuando en agosto del 2015 se reunió con el presidente del club Yakart, Antonio Jul, para hablar de este tema. Entonces incluso se apuntó una posible ubicación: O Pombal, por tratarse de un espacio próximo al centro urbano y dotado de servicios de suministro de agua y de saneamiento. Pero aquella idea no llegó a concretarse en nada.