Salta la alarma en el Umia: nuevo vertido en O Piorno tras la inversión de 950.000 euros realizada por la Xunta
AROUSA

Los trabajos rematados a finales de noviembre no han sido suficientes para evitar un nuevo episodio contaminante que ha causado indignación entre los usuarios del río
21 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Es blancuzco, grasiento y desprende un olor insoportable. El vertido descubierto ayer en el Umia, en la zona de O Piorno, tiene las mismas características que cualquiera de las decenas de vertidos descubiertas anteriormente en ese punto del río. Los responsables del Club Náutico O Muíño fueron quienes, una vez más, dieron la voz de alarma ante un episodio contaminante que, en esta ocasión, está revestido de una particular gravedad: es el primero que se registra en el río después de que la Xunta de Galicia realizase una inversión de 950.000 euros en la zona para, en teoría, poner fin a situaciones como esta. Desde el club deportivo, auténtica conciencia del río, apenas dan crédito a lo que está pasando. «Dirán que foron as choivas, as pluviais... Sempre din o mesmo, pero este ano non choveu tanto», señalan desde la entidad. Descubrieron el vertido este lunes, pero por el aspecto que presenta la zona, dicen, las aguas contaminadas deben de llevar ya varios días saliendo al caudal del río sin ningún tipo de impedimento.
Desde el club consideran que alguien debería hacerse responsable de lo ocurrido. «Gastaron case un millón de euros; dixeron que o problema ía quedar resolto. Pois as cousas están como están; está vertendo a saco», dicen desde la entidad deportiva. Recuerdan que llevan años reclamando soluciones a la Mancomunidade do Salnés, quien a su vez pidió a la Xunta que tomase medidas.
Tras muchos años de espera, en el mes de noviembre del 2024, desde la Administración autonómica anunciaban el fin de unas obras que iban a dar «resposta ás demandas da Mancomunidade do Salnés e consistiron na modificación do trazado da impulsión do bombeo de Cabanelas para que verta as súas augas directamente á EDAR de Ribadumia, sen pasar previamente polo bombeo de Barrantes, como ocorría ata agora». Aludían entonces desde la Xunta a la situación que han generado los vertidos que afectaron en varias ocasiones al caudal del río Umia con la consiguiente problema de contaminación.
Pero parece que la millonaria inversión no ha tenido los efectos esperados, ni ha cumplido con las expectativas previstas. Desde la gerencia de la Mancomunidade do Salnés mostraban ayer cierta perplejidad y estupor ante la aparición de este nuevo vertido, que no debería estarse produciendo. Ahora tocará revisar qué es lo que se ha hecho mal y pensar cómo solucionar, de verdad, el problema de los vertidos.